El Barça Lassa tuvo suficiente con un notable primer tiempo, que acabó con un parcial de 46-26, y alargó la fiesta de la Copa del Rey en la Euroliga, en la que derrotó a un Kirolbet Baskonia desacertado en ataque que en el Palau Blaugrana (77-67) no fue capaz de recuperarse de los sinsabores coperos.
En unos primeros veinte minutos con un baloncesto de quilates gracias a la jerarquía interior de Kevin Seraphin (15 puntos y 6 rebotes) y a la dirección de Thomas Heurtel (11 puntos y 9 asistencias), el equipo local se deshizo de la estela de un rival al que le penalizaron los errores desde la línea de tiros libres (8 fallos en 18 intentos en todo el duelo).
El primer cuarto marcó los biorritmos del choque. El ritmo defensivo y físico del Barcelona fue diabólico y el Baskonia pagó cara la falta de acierto.
Los baskonistas firmaron unos primeros diez minutos nefastos en ataque. Las estadísticas lo dicen todo: 3 aciertos de 14 intentos en tiros de dos, 0 de 5 en triples y 3 de 5 en tiros libres.
A ello se sumó el control del rebote por parte del equipo azulgrana que, sin completar un primer tiempo sobresaliente, terminó los primeros diez minutos con una cómoda renta de trece puntos (22-9).
El equilibrio azulgrana -hasta siete jugadores anotaron en el primer cuarto- contrastaba con la pobre aportación del equipo entrenado por Perasovic.
Solo Vildoza, Hilliard, Shields, máximo anotador del choque con 18 puntos, y Jones sumaron en los primeros diez minutos. Si en el primer acto el equipo fue el protagonista en las filas del Barcelona, en el segundo Kevin Seraphin brilló con luz propia.
El francés mandó en la zona y cerró la primera parte con una progresión sobresaliente (15 puntos y 4 rebotes). Con el pívot galo en la pista, Ribas anotando triples y Heurtel desequilibrando con hasta cinco asistencias, el Barcelona llegó a gozar de una máxima ventaja de 25 puntos (44-19, min.16).
Pidió tiempo muerto Perasovic y su equipo reaccionó. Lo consiguió mejorando la intensidad defensiva en los últimos cuatro minutos.
Shields y Janning, este último desde la línea de 6,75 metros, daban algo de aire a la escuadra vasca que, sin embargo, cerró el primer tiempo con la victoria muy cuesta arriba (46-26).
En la reanudación, la buena dinámica defensiva del equipo visitante se confirmó. Al Barcelona le costaba más anotar -solo Pangos y Heurtel sumaban en tiros de campo-, aunque el Baskonia no lo acababa de aprovecharlo en ataque debido a pérdidas infantiles.
Pese a ello, Shields, desde la línea de 6,75 metros, y Huertas, en la dirección, se convertieron en una amenaza real para los de Pesic, que veían como su rival, gracias a un parcial de 0-9, se acercaba (54-44, min.27).
Pero en su intento de remontada, Baskonia no anotó canastas que parecían sencillas y el Barcelona reaccionó para firmar un parcial de 8-1, edificado desde la línea de 6,75 metros y con cinco puntos balsámicos de Ribas, con el que los locales volvían a controlar el marcador (62-45) antes del último acto.
Parecía que el Barcelona dejaba el partido visto por sentencia con cinco puntos consecutivos de Heurtel (67-47, min.32), pero Baskonia volvió a acercarse de la mano de Jones (69-54, min.37).
El ala-pívot estuvo demasiado solo en ataque. El Barça, sin fluidez ni acierto, contemporizó el encuentro a través de su defensa y sumó un triunfo importante en la lucha por el cuarto puesto que mantiene con el Anadolu Efes.
Cerró Baskonia el segundo tiempo con un parcial favorable (31-41), pero su mal inicio le condenó y sumó su duodécima derrota en la máxima competición europea. Tras el tropiezo en el Palau, el conjunto vasco cae hasta la novena posición.
