El Barça Lassa volvió a ganar al Real Madrid, esta vez en la Euroliga, en un encuentro sin polémica arbitral en la que el equipo azulgrana se acercó a la cuarta plaza mostrando su mejor versión defensiva (77-70) para desconectar el talento ofensivo del equipo blanco.
En un encuentro muy físico en el que Ante Tomic (22 puntos y 13 rebotes) y Thomas Heurtel (17 puntos) brillaron en ataque, el conjunto blanco no pudo correr y encontrar a sus cañoneros, sin puntería desde el perímetro (8 triples de 31 intentos), ni controlar el rebote (32 por 43 de su rival).
La resaca de la polémica Copa del Rey todavía sobrevolaba en el ambiente del Palau Blaugrana que se llenó para homenajear antes del encuentro a Juan Carlos Navarro. Prueba de ello es que la grada de animación azulgrana desplegó un mosaico en el que aparecía la caricatura de un aficionado blanco llorando y el mensaje: "Érase una vez un ladrón llorón".
En el parqué, los resquicios del pasado quedaron en un segundo plano y mandaron las defensas. Ambos entrenadores diseñaron un primer cuarto físico. Laso apostó de inicio por Tavares, que incomodó a un errático Tomic.
Los visitantes empezaron con un primer parcial de 0-5 (min.2), pero apareció Heurtel para endosar él solito un parcial de 7-0. Pese a el desequilibrio del base francés, el Barcelona no conseguía mover el balón con fluidez y solo anotaba desde la línea de tiros libres. El bloqueo ofensivo del equipo azulgrana no lo aprovechó el Real Madrid.
Con Llull algo fallón desde el perímetro, solo Carroll se erigía en ataque para dar una mínima ventaja su equipo (16-17) en los primeros 10 minutos. El segundo cuarto fue un duelo de rachas ofensivas. El Real Madrid dio el primer golpe. Con Carroll y Rudy Fernández inspirados des del perímetro, endosó un parcial de 3-12 que obligaba a Pesic a parar el encuentro (21-29, min.15).
El entrenador serbio encontró en Kyle Kuric el desatascador ofensivo de su equipo. El canadiense, desde el perímetro, y Ante Tomic, en la pintura, fueron claves en el parcial de 21-8 que el Barça Lassa endosó antes del descanso (42-37). El Real Madrid, sin ideas en ataque y con algunas pérdidas infantiles, cerró el primer tiempo con una dinámica negativa que se refrendó en el inicio del tercer cuarto.
Intenso en defensa con un hiperactivo Chris Singleton, el Barcelona ahogó al Real Madrid y, con Tomic y Kuric mandando de nuevo en ataque, endosó un parcial de 8-0 que situaba a los locales con una cómoda ventaja de trece puntos (50-37). El Madrid estuvo 3 minutos y 40 segundos sin anotar.
Llull puso fin a la racha, pero no a las malas sensaciones ofensivas. Pablo Laso apretó las tuercas en defensa. Lo notaba el Barcelona, momento en el que el Real Madrid, en su versión más irregular, despertó en ataque con Llull, Rudy y Randolph, que acercaron a su equipo antes del último periodo (56-51) que empezó con un adicional de Ribas por técnica a Pablo Laso.
El ritmo lo marcó de nuevo la defensa azulgrana, que secó a los talentosos jugadores blancos durante cerca de tres minutos. En éstas, el Barcelona llegó a gozar de una renta de diez puntos (61-51, min.33). Sin sus exteriores inspirados, el Real Madrid se estrellaba en ataque y solo Reyes y Carroll, con un tiro adicional tras técnica, lograron anotar (61-54).
Con el rebote controlado y un Singleton inmenso atrás, un triple de Heurtel volvía a dar alas al Barcelona (67-54, min.35). Pedía tiempo muerto Pablo Laso y solo Rudy Fernández respondió desde el perímetro con dos triples consecutivos que mantenían vivo a su equipo (71-64, min.38).
Otro triple de Campazzo acercaba al Real Madrid a cinco puntos (75-70) falta de 1 minuto y 20 segyndos. Pero en la siguiente posesión mandó el rebote ofensivo del Barcelona. Singleton se hacía grande en la zona y Tomic rescataba a los suyos con una canasta que sería definitiva a falta de 50 segundos.
El Palau Blaugrana despidió al Real Madrid al grito de "llorenes", mientras sus jugadores celebraban un triunfo con el que se sitúan con el mismo balance de victorias que el Anadolu Efes de Estambul, cuarto clasificado y próximo rival europeo.