Baloncesto
Carlos Martínez, el mejor jugador español de 3x3 y empresario: "Mi causa justa es hacer un mundo mejor a través del deporte"
Actualmente el gallego reside y juega en Suiza en la disciplina 3x3, esperando llegar a los próximos Juegos Olímpicos de Los Ángeles.
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Carlos Martínez (A Coruña, 1996) es el mejor jugador español de la FIBA. Jugó al baloncesto convencional en la Euroliga con el Baskonia y en otros equipos como el Leyma Coruña, el Oviedo o el Lucentum Alicante. Desde hace cinco años juega a la disciplina olímpica del 3x3 y ahora lo hace en el Lausanne, en Suiza, cerca de Ginebra. Además, es el capitán de la selección española en esta modalidad.
Proyectos empresariales relacionados con el deporte
Sin embargo, el exitoso jugador gallego esconde también una gran faceta empresarial con varios proyectos, todos ellos enfocados al deporte y con una gran huella gallega. Destacan los gimnasios Neofit; una gama de productos de recuperación aunados bajo el nombre de Wellbeinn; y, la más especial sin duda, Ecoballution.
"Suena a topicazo pero los dos mundos (deporte y negocios) tienen mucho que ver, comparten muchos valores", cuenta el gallego. "Soy inquieto y competitivo", añade, lo que ayuda en ambos mundos.
Ecoballution, una empresa novedosa y sostenible
Es la más especial por su trasfondo medioambiental y social. En Ecoballution reciclan toneladas de redes y residuos del mar para convertirlos en productos y accesorios deportivos, como redes de porterías o de canastas. Además, también lanzan colecciones de ropa, aprovechando los mismos residuos y, de hecho, sin tintes, buscando productos respetuosos con la piel. Y es que detrás de sus proyectos hay una gran premisa: "Mi causa justa es hacer un mundo mejor a través del deporte".
Algunos de sus productos se pueden encontrar en muchas pistas de basket y fútbol de distintos ayuntamientos gallegos y también se pueden comprar en grandes superficies como Decathlon, que ha confiado en la sostenibilidad de estos de origen gallego y artesanos en su mayoría.
Pero, además de lo medioambiental, este proyecto liderado por Carlos pone en valor el trabajo de las redeiras, las mujeres que trabajan y crean las redes de pesca en la costa gallega. Rosa Rodríguez es la cabecilla de todas las que están detrás de este proyecto: "A nosotras nos da mucho porque tenemos poco relevo y visibilidad". Son la base de estas redes de baloncesto, volleyball y fútbol y las crean en el puerto de Corme, en Ponteceso, A Coruña.
De este modo, Carlos les suministra toneladas de redes ya usadas (de distintos tipos de pesca) a las redeiras y ellas adaptan esa materia prima al producto final, desde redes de canastas a aquellas que sirven para portar el balón. A veces tienen que añadir algo más de otros materiales y tienen que respetar la estética y forma de estas para que puedan ser luego homologadas. Por ejemplo, las redes de basket tienen que ser de color blanco. "Es muy bonito verlas puestas y que sean redes que vienen de la mar y que evitamos, haciendo estos productos, que acaben tiradas por ahí", explica Rosa.
Además, estas redeiras han impartido formaciones a modo de talleres en el centro penitenciario de Teixeiro y algunos de los reos han estado fabricando redes que se colocarán luego en algunos centros educativos de la zona de A Costa da Morte. "Es una forma de tener también en cuenta a estas personas que quizás a veces quedan un poco en exclusión", cuenta Carlos.
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