Impresionante. Cuesta definir un final de partido como el que se ha vivido en las semifinales del Mundial de Baloncesto 2019 entre España y Australia. Los de Sergio Scariolo consiguen así, el pase a la final a la espera de rival.
Emocionante, de infarto y con final feliz. Así se puede definir el partido de la Selección española, que acaba de ganar frente a Australia en las semifinales del Mundial de China 2019.
Hacía 13 años que no llegaba a una semifinal mundialista y la Selección española comenzó con las ganas propias que requiere un encuentro así. Sin embargo, se encontraron con la dureza propia de la Selección australiana y el acierto de Mills.
22-21: así finalizó el primer cuarto del partido con un triplazo de Sergio Llull y fue en el segundo cuarto cuando la Selección comenzó a fallar tiros fáciles desde fuera de la zona. Tratando de contrarrestar su atasco con buenas defensas, concedieron demasiadas segundas oportunidades y Australia se fue por delante en el marcador: 32-37.
Entre diferencias de 3 a 6 puntos continuaba España perdiendo durante el tercer cuarto, con errores en el rebote defensivo. Sin embargo, un gran Marc Gasol, junto a Rubio y Llull, mantuvieron a la Selección en la pelea por el partido.
Son un 'muro', así lo dicen al principio y al final de cada partido, y lo han demostrado. Comenzaba el cuarto cuarto y Australia se ponía a 8 puntos. Sin embargo, el choque comienza a cambiar. Triple de Pau Ribas, canasta de Llull y España ya esta a tan solo 2 puntos.
Con la miel en los labios, se vivían los últimos segundos del partido, que finalizaron en empate a 71. Dos tiros libres encestados de Marc Gasol, empujados por el aliento de toda España, así lo hicieron posible.
La primera de las dos prorrógas del partido, finalizó con otros dos tiros libres de Marc Gasol para empatar el partido. Un final de infarto, que parecía precisamente, no tener final.
Los últimos cinco minutos del partido fueron un auténtico disfrute. Defensa, ataque...dos triples de Sergio Llull, 4 puntos seguidos de Marc y los tiros libres de Ricky y Claver, adelantaron un final más que ansiado.
España está en la final. España consigue soñar despierta.