La recreación del accidente de Kobe Bryant que muestra qué le sucedió realmente al helicóptero

El Departamento de Policía de Los Ángeles ha asegurado que la mañana del domingo había tomado la decisión de que todos sus helicópteros de la zona aterrizaran debido al mal clima para volar debido a la niebla. No obstante, el aparato en que murieron Kobe Bryant y otras ocho personas decidió volar.

Bryant, de 41 años, su hija Gianna, de 13, acompañados de otras ocho personas más, murieron después de que su helicóptero se estrellara en la zona de Calabasas, un área montañosa cercana a Los Ángeles.

Según los registros, el helicóptero en el que viajaba Kobe Bryant rodeó el área del Zoo de Los Ángeles hasta seis veces a una altura muy baja, tal vez a la espera de que la niebla se despejara.

Según el portal TMZ, el piloto contactó con la torre de control en el aeropuerto de Burbank alrededor de las nueve y media de la mañana, e informó de que llevaba 15 minutos dando vueltas: "Vuela demasiado bajo para guiarlo en este momento", le dijo torre de control.

El helicóptero fue hacia el norte y al poco tiempo se vio envuelto en una niebla muy espesa, dirigiéndose entonces a la zona montañosa de Calabasas y ascendiendo de pronto de 1.200 pies a 2.000 pies.

Improbable fallo motor

La aeronave, construido en 1991, salió del aeropuerto John Wayne a las 9:06 de la mañana. Las autoridades recibieron la llamada del accidente al 911 a las 9:47.

Kurt Deetz, expiloto de Island Express Helicopters y expiloto de Kobe Bryant entre 2014 y 2016, apunta que el helicóptero en que viajaba el ex jugador de los Lakers Kobe Bryant tenía un gran historial de seguridad.

Deetz ha apuntado al periódico Los Angeles Times que la estrella de la NBA viajaba en la nave Two Echo X-ray, de la compañía Sikorsky S-76B, y con un registro de cola No. N72EX.

Los expertos consideran poco probable que el helicóptero haya sufrido algún fallo mecánico tan grave como para provocar el accidente. Tenía dos motores gemelos y podría haber seguido volando solo con uno. Un fallo simultáneo de los dos motores es casi imposible.

El portavoz del Departamento de Policía de Los Ángeles explicó que el cuerpo policial tuvo que dar orden a sus helicópteros de suspender todos los vuelos por la falta de visibilidad, inferior al mínimo de seguridad de tres kilómetros.

Fuente: www.planefilms.com