Ayón pelea el balón en el partido ante el Manresa

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LIGA ENDESA | REAL MADRID 96-70 MANRESA

Llull vuelve a ejercer de líder en la gris victoria del Madrid ante el Manresa

El Real Madrid se llevó una gris victoria ante el Manresa (96-70), marcada por las lesiones de Felipe Reyes y Draper, además de las dos técnicas consecutivas a Andrés Nocioni. Sergio Llull volvió a ejercer de líder y guió a los blancos al triunfo con 24 puntos.

El Real Madrid consiguió una victoria gris ante el ICL Manresa por 96-70, marcada por muchos incidentes como las lesiones de Felipe Reyes y Dontaye Draper, o la autoexclusión de Andrés Nocioni, por dos técnicas consecutivas, y en la que sólo Sergio Llull consiguió poner algo de color con sus 24 puntos.

Llull, que no entiende otra cosa que exprimirse a fondo independientemente del rival o las circunstancias, consiguió 4/5 en triples en apenas 16 minutos de juego y revolucionó el partido y a su equipo con su entrega. Circunstancias poco habituales marcaron el partido desde los primeros segundos.

No es normal que Felipe Reyes, ni ningún jugador, se lesione en el tobillo en la primera jugada, eso sí tras capturar un rebote. Tampoco que un jugador, Luksa Andric, cometa su tercera personal a los 3.30 minutos (8-5) y menos que otro jugador, Patrik Auda, se lesione de gravedad otro tobillo y tenga que abandonar la pista en camilla, 11-10 (min.4.30).

Reyes, que se fue directo al vestuario cuando se lesionó, compareció de nuevo en la pista con aparente normalidad, justo cuando Auda era retirado en camilla. Así las cosas, entre accidentes, Sergio Llull y Luka Doncic, ambos con dos triples de tres intentos, lideraron a un Real Madrid que acabó el primer cuarto con 25-17 sin mayores esfuerzos.

El Madrid desconecta en el segundo cuarto

El segundo cuarto también fue raro. El Madrid desconectó un poco, el Manresa se centró otro poco, Jeffery Taylor se reivindicó con buenos momentos en ataque, para compensar su habitual y sordo trabajo atrás. Pero más raro todavía fue que Andrés Nocioni se borrara del partido con dos técnicas seguidas a falta de veinte segundos para el descanso, por hacer observaciones a los árbitros, sin gestos, sin estridencias.

Con tantos 'accidentes' el marcador al descanso fue de 41-36 y la diferencia entre el líder y el colista de la clasificación se diluyó demasiado. El Madrid se puso las pilas en la continuación, o mejor dicho Llull se las puso con otra actuación eléctrica explosiva. Llull en estado puro. En cinco minutos anotó doce puntos para sumar 24 en el minuto 25 (60-40).

Eso sí, hubo otro accidente porque Dontaye Draper no compareció tras el descanso hasta casi el final del tercer cuarto, que lo hizo al banquillo del equipo debido a unas molestias en la espalda. Con un parcial de 33-15 el Madrid acabó de decantar hacia su lado la victoria, 74-51.

Los diez minutos finales fueron de descanso para los habituales y de rodaje para los que menos minutos tienen en su haber. Sobraron de cualquier manera. El triunfo, que finalmente fue por 96-70, estaba sentenciado desde mucho antes.

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