Marc Gasol parece que no está necesitando mucho tiempo para aclimatarse a su nuevo equipo. El pívot catalán está recuperando sensaciones en ataque que hacía mucho tiempo que no veíamos. Esta madrugada, en la aplastante victoria contra los Wolves de Ricky Rubio realizó un gran partido ofensivo (12 puntos y 8 asistencias) para ayudar a los Angeles Lakers a conseguir su segunda victoria de la temporada (127-91).
Es pronto para decir nada, pero parece que a los hermanos Gasol les gustan los nuevos retos. A Marc ya le vimos rendir bien en Toronto, donde fue campeón de la NBA, pero no vimos ni de lejos su mejor versión ofensiva. Sin embargo, en apenas tres partidos en los Lakers está volviendo a mostrar su calidad y decisión en los aros.
La máxima amenaza interior de los Timberwolves, Karl Anthony Towns, fue baja en el partido de ayer, hecho que Marc Gasol aprovechó para liberarse de su marcaje y centrarse en buscar las mejores jugadas en cada posesión, ya fuera anotando (12) o asistiendo (8).
El encuentro no tuvo mucha historia, los locales abrieron una brecha en el marcador nada más empezar y en el resto del partido se dedicaron a mantenerla y a divertirse, porque no decirlo así... LeBron James aprovechó un encuentro cómodo para empezar a entenderse con Marc Gasol.
Los Wolves de Ricky Rubio (9 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias) venían de ganar sus dos primeros partidos dejando grandes sensaciones respecto a la temporada pasada, sin embargo, el escenario y la baja de Towns minaron la confianza de los visitantes, que en ningún momento creyeron en la victoria. Marc Gasol se acercó al triple doble (12 puntos, 8 asistencias y 7 rebotes), además de poner 4 tapones y de no fallar ni un solo tiro, incluyendo tres triples sin error.