El Real Madrid ha sellado su pase a la final de la Liga Endesa después de imponerse también en el tercer encuentro (3-0) de las semifinales del 'Playoff' por el título al Valencia Basket (78-85), un resultado trabajado ante un conjunto 'taronja' que presentó batalla hasta el final.
Los de Pablo Laso, que esperan ya a Barça Lassa o Tecnyconta Zaragoza, no fallaron en el traslado de la eliminatoria a la ciudad del Turia, aunque tuvieron que apretar los dientes en unos últimos minutos en los que los locales, que contaron con un excepcional Bojan Dubljevic (19 puntos y 6 de 10 en triples), se acercaron en busca de la gesta. Rudy Fernández (16 puntos), Randolph (11) y Campazzo (14) guiaron a los blancos a su octava final consecutiva.
Con un caldeado ambiente en una Fonteta a reventar, los de Jaume Ponsarnau saltaron a la pista con la mente puesta en forzar el cuarto duelo. Así, el parcial 'taronja' de salida de 10-3 obligó a reaccionar pronto al cuadro madridista, que amparado en Taylor y Rudy Fernández logró dar la vuelta al luminoso al final del primer cuarto (19-20).
La entrada de Will Thomas tras los primeros diez minutos revolucionó un choque en el que los valencianos subieron considerablemente la intensidad y fueron fraguando poco a poco la remontada; los 7 puntos del ala-pívot estadounidense volvieron a poner al conjunto local por delante y espolearon a los casi 8.000 espectadores en el pabellón Fuente de San Luis.
Aunque el Real Madrid respondió con un 5-0 tras un tiempo muerto solicitado por Pablo Laso, Guillem Vives y Sam Van Rossom, este último con una bonita bandeja, defendían la renta para irse con un favorable 38-35 a vestuarios.
El conjunto blanco abrió pista tras el descanso con cinco puntos seguidos que le ponían otra vez con ventaja, hasta que emergió la figura de Bojan Dubljevic para devolver el entusiasmo a la Fonteta. Hasta 19 puntos en el parcial del pívot montenegrino, con un impresionante 7-9 en tiros de triple, guiaron a los 'taronjas' y les permitieron llegar con vida al definitivo último cuarto (60-63).
Cuando parecía que los de Laso se marchaban definitivamente (+6), Van Rossom hizo su aparición con seis tantos seguidos que ponían a su equipo a uno (78-79). Sin embargo, Llull y Campazzo acababan con las incógnitas. Solo quedó tiempo para que la Fonteta en pie ovacionase a su capitán, Rafa Martínez, que jugó los últimos segundos y se despidió de su casa con lágrimas en los ojos.