El Real Madrid venció al Bayern Múnich por 91-78 y se clasificó matemáticamente para los 'playoffs' a falta de siete jornadas de la fase regular, en un partido demasiado plano en el que el conjunto bávaro nunca fue un dolor de cabeza de cara a la victoria.
Un triple de Gabriel Deck, a la carrera y a tablero, en el último instante del primer cuarto, 22-17, fue lo más destacable de los diez primeros minutos de juego.
El Madrid comenzó bien con dos bandejitas de Fabien Causeur en el primer minuto, ante la pasividad de la defensa alemana. Pero ahí se paró el Madrid. El poco ritmo, el escaso ambiente y la única amenaza de Petteri Koponen propició que con poco esfuerzo se consiguieran esos cinco puntos de renta.
El inicio del segundo acto fue eléctrico. Jeffery Taylor robó el balón tras el saque del Bayern y seguidamente clavó un triple y poco después una mandarina de Sergio Llull cerró un parcial de 9-0 (31-17) cuando no se había cumplido el primer minuto. Esta ventaja, esta facilidad y este despegue en el marcador volvieron a causar el efecto no deseado de la falta de tensión, del poco empuje y del dejar hacer al rival.
El Bayern, con Danilo Barthel a la cabeza, comenzó a crecer en su juego y a acercarse en el marcador, mientras el Madrid no salía de esa especie de somnolencia. Sólo alguna acción de Jaycee Carroll y la defensa de Taylor, primero sobre Koponen y después Sobre Vladimir Lucic podrían destacar de un partido demasiado plano en los primeros veinte minutos.
El 42-39 con el que los equipos alcanzaron los vestuarios fue el mejor reflejo de lo abierto que quedó el partido. Una ligera mejoría en defensa, en el inicio del tercer acto, fue suficiente para restituir ventajas más cómodas en el marcador, 56-45 (m.26) tras un parcial de 10-0 en algo menos de tres minutos.
Las buenas acciones de Causeur y Deck, unido al dominio de Walter Tavares bajo los tableros fueron fundamentales en esa ventaja, mientras que Nihad Dedovic enseñaba algo de su arsenal de recursos en ataque.
Dos triples consecutivos de Llull, nada más volver al partido, y de Anthony Randolph dispararon el marcador, 62-47 (m.27.45). Y un 3+1 del estadounidense con pasaporte esloveno cerró el tercer cuarto con un 71-52 y un parcial de 29-13, fiel reflejo de la superioridad madridista en este periodo.
Con 19 puntos de ventaja, diez minutos por delante y el pasaporte para los 'playoffs' prácticamente sellado, el Madrid bajó el tono y también el Bayern, aunque a base de triples, 4 en los primeros 4 minutos, se acercó en el marcador, 78-68 (m.34).
Un tiempo muerto de Laso para recordar a sus jugadores que todavía quedaba partido por delante fue suficiente para alcanzar la victoria sin demasiados sobresaltos, 91-78. El Bayern no fue ningún dolor de cabeza y el Madrid ya está clasificado entre los ocho primeros de la Euroliga a falta de siete jornadas.