La combinación del base Chris Paul y el escolta James Harden encabezó el ataque balanceado de los Rockets de Houston que se impusieron a domicilio por 87-100 a los Jazz de Utah en el cuarto partido de la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Oeste que ahora dominan 3-1 al mejor de siete.
Paul brilló con un doble-doble de 27 puntos, capturo 12 rebotes, incluidos 10 defensivos, repartió seis asistencias y recuperó dos balones, que lo dejaron como líder de los Rockets. Mientras que Harden acabó con 24 puntos, incluidos 14 en el primer cuarto --su mejor marca en lo que va de playoffs-- cuatro rebotes, tres asistencias, y cuatro recuperaciones de balón, aunque tuvo la debilidad de perder ocho balones.
El pívot suizo Clint Capela mantuvo su condición de jugador clave dentro de la pintura al conseguir un doble-doble de 12 puntos, 15 rebotes --10 defensivos--, dio dos asistencias, recuperó dos balones y puso seis tapones --líder indiscutible-- de los Rockets en esa faceta del juego.
Capela no sólo tuvo protagonismo sino que también impuso su carácter y forzó una técnica en su duelo con el escolta novato Donovan Mitchello, de los Jazz. El alero PJ Tucker como titular se convirtió en el cuarto máximo encestador de los Rockets al aportar un 11 puntos, siete rebotes y puso un tapón.
Mientras que el pívot brasileño Nené Hilario jugó 10 minutos como reserva y aportó dos puntos al fallar un tiro de campo, y acertó 2-2 desde la línea de personal. Hilario capturó dos rebotes, dio una asistencia, recuperó un balón, perdió otro y cometió tres faltas personales.
Sin el base estrella español Ricky Rubio por cuarto partido consecutivo al no haberse recuperado del desgarro del tendón que sufre en la corva de la pierna izquierda, Mitchell volvió a ser el líder del ataque de los Jazz al aportar 25 puntos antes que quedase eliminado por seis faltas personales.
Mientras que el alero australiano Joe Ingles, que fue el factor sorpresa ganador en el segundo partido disputado en el Toyota Center de Houston, volvió a estar inconsistente con su juego ofensivo, como le sucedió en el tercer encuentro, y acabó con apenas 15 puntos.
El pívot francés Rudy Gobert, que ha bajado su rendimiento sin la presencia de Rubio con quien mejor se identifica a la hora de recibir los balones dentro de la pintura, acabó con un doble-doble de 11 puntos, 10 rebotes y tres tapones, que no impidieron la derrota de los Jazz.
Gobert fue el tercer jugador de los Jazz que tuvieron números de dos dígitos, y concluyeron el partido con marca de 39 (32-83) por ciento de acierto en los tiros de campo, y el 24 (7-29) de triples, comparados al 42 (37-88) y el 26 (10-38), respectivamente, de los Rockets, que también dominaron en el juego interior con 49 rebotes por 45 del equipo de Utah.
El base brasileño Raúl Neto acabó como sexto jugador de los Jazz al disputar 18 minutos de reserva y aportar nueve puntos tras anotar 3 de 10 tiros de campo, incluidos dos triples de tres intentos, y acertó 1-1 desde la línea de personal. Neto capturó dos re botes, dio dos asistencias, perdió dos balones y cometió una falta personal.
Los Rockets estuvieron al frente del marcador y aunque los Jazz con triple de Mitchel se pusieron a solo cinco (80-85) al comienzo del cuarto periodo, Paul, que empató su mejor marca en lo que va de playoffs, hizo un tiro en suspensión y el alero de origen dominicano Trevor Ariza respondió con un triple decisivo para una ventaja de los Rockets de 10 tantos.
Ahí se acabó todo el esfuerzo de los Jazz que nunca más pudieron competir con la defensa de los Rockets, que ahora regresan a su campo del Toyota Center de Houston, donde el martes se jugará el quinto partido de la serie que podría ser el decisivo si el equipo tejano consigue la victoria.
La gran esperanza para los Jazz es tener la posibilidad que Rubio pueda volver con el equipo y les ayude a evitar la derrota y forzar el sexto partido, que sería de nuevo en Salt Lake City.
Kevin Durant acerca las finales del Oeste a los Warriors
El alero Kevin Durant reivindicó su condición de líder y con 38 puntos y nueve rebotes encabezó el ataque balanceado de los Warriors de Golden State que se impusieron a domicilio 92-118 ante los Pelicans de Nueva Orleans en el cuarto partido de la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Oeste.
La victoria pone a los Warriors con la ventaja de 3-1 en la serie que disputan al mejor de siete y el quinto partido se jugará el próximo martes en el Oracle Arena de Oakland. Los actuales campeones de la NBA, que defienden el título de la Conferencia Oeste, se recuperaron de su derrota por 19 puntos en el tercer partido con un gran juego que les guió al triunfo sin nunca estar abajo en el marcador y sacar ventaja de hasta 26 tantos.
Durant acertó 15 de 27 tiros de campo, incluidos 2 de 5 triples, y 6-6 desde la línea de personal, además de repartir cinco asistencias, recuperó un balón, perdió dos y puso un tapón. El base Stephen Curry recuperó su consistencias y aportó 23 tantos, con 4 de 9 triples, mientras que el escolta Klay Thompson llegó a los 13 tantos.
Otro base, el reserva Quinn Cook, que a comienzo de temporada estuvo en el banquillo de los Pelicans, se convirtió de nuevo en factor sorpresa ganador al conseguir 12 tantos que lo dejaron como sexto jugador de los Warriors.
El ala-pívot Draymond Green jugó 37 minutos y aportó ocho puntos, nueve rebotes --incluidos ocho defensivos--, repartió nueve asistencias, recuperó cuatro balones, perdió otros tres, puso dos tapones y le pitaron tres faltas personales, sin que esta vez tuviese ningún enfrentamiento dialéctico con el base Rajon Rondo.
El ataque balanceado de los Warriors les permitió estar siempre en control del ritmo del juego, del marcador y del partido, sin que los Pelicans tuviesen capacidad de reacción. Esta vez el pívot Anthony Davis, aunque se mantuvo líder de los Pelicans con un doble-doble de 26 puntos y 12 rebotes, no pudo imponer su dominio dentro de la zona. Además de tener poca inspiración encestadora con apenas un 36 (32-88) por ciento de acierto en los tiros de campo, mientras que fallaron 22 de 26 intentos de triples.
El alero E'Twaun Moore logró 20 puntos como segundo máximo encestador de los Pelicans y el base Jrue Holiday llegó a los 19 tantos con siete rebotes y tres asistencias. Pero Rondo, que en el tercer partido del viernes había sido clave, esta vez apenas aportó seis puntos al fallar 2 de 10 tiros de campo, incluido un triple de dos intentos, 1 de 4 tiros libres.
Aunque aportó 11 rebotes y seis asistencias, estuvo lejos de las 21 que consiguió en el tercer partido que ganaron los Pelicans (119-100). Tampoco destacó en el juego ofensivo el ala-pívot montenegrino español Nikola Mirotic que acabó con siete puntos en los 32 minutos que disputó como titular.
Mirotic anotó uno de siete tiros de campo, falló los dos que hizo desde fuera del perímetro, y acertó 5 de 5 desde la línea de personal. El exjugador del Real Madrid si respondió dentro de la pintura al capturar 11 rebotes, incluidos nueve defensivos, dio dos asistencias, puso dos tapones y perdió dos balones, sin que al final tampoco pudiese ser factor ganador.
Los Pelicans no tuvieron su mejor control del balón al perderlo 19 veces que los Warriors convirtieron en 21 puntos, mientras que los actuales campeones de liga sólo tuvieron 11 perdidas. Después de tener poca eficacia ofensiva en su derrota del viernes en la noche, los Warriors pretendían recuperar el ritmo y lo consiguieron en forma inmediata.
Acertaron seis de sus primeros ocho tiros a canasta, en los que Durant hizo buenos sus primeros tres, mientras que Thompson y Curry consiguieron sendos triples. La puntería afinada y una sólida defensa, que incluyó un tapón de Green a una bandeja de Rondo, permitieron a Golden State irse arriba 10 puntos antes de que se cumplieran cuatro minutos del partido.
Por su parte, los Pelicans fallaron ocho de sus primeros 10 tiros de campo, e iban abajo 20-6 después de que Green anotara el cuarto triple de Golden State en los primeros seis minutos del encuentro. Los Warriors sacaban ventaja de 18 puntos en la primera mitad cuando un lanzamiento elevado y suave de Cook puso el marcador parcial de 15-33 en el primer periodo.
Los Pelicans tuvieron un 37 por ciento de acierto en los tiros de campo en la primera parte, pero gracias al dominio bajo los aros y varios tiros libres, al descanso redujeron a siete la ventaja de los Warriors siete puntos (54-61), que les metió en el partido, pero el ataque de los Warriors fue demoledor en el tercer periodo (19-33) y ahí se acabaron las esperanzas de Nueva Orleans.