El ciclista belga Greg van Avermaet (BMC Racing) ha conseguido alzarse con el primer 'monumento' de su trayectoria deportiva tras ganar al sprint al checo Zdenek Stybar (Etixx) en el velódromo de Roubaix (Francia), y conseguir de este modo la París-Roubaix, su cuarta clásica de la primavera.
Van Avermaet jugó al despiste en la tensa última vuelta al recinto de ciclismo en pista, esperando con los tres escapados del día a que llegaran los dos ciclistas perseguidores, mucho más cansados por el esfuerzo hecho. Justo cuando todo parecía indicar que Gianni Moscon (Sky) se iba a hacer con el título, Stybar arrancó con fuerza por su izquierda, encontrando la pronta respuesta del belga que, tras una demostración de fortaleza, adelantó al checo para alzar el brazo y alzar el 'Adoquín de oro'.
Al final no hubo pelea entre Van Avermaet y el eslovaco Peter Sagan (Bora-Hansgrohe), que no tuvo su día y al que terminó de dar la puntilla un pinchazo en la rueda trasera de su bicicleta en plena persecución de los escapados, a falta de unos 25 kilómetros para el final. El bicampeón del mundo conectó con el grupo perseguidor pero estaba muy fatigado cuando Tom Boonen (Quick Step Floors), a la postre otro de los favoritos, trató de arrancar para conectar con cabeza de carrera.
Oss busco abrir hueco a falta de 30 kilómetros
Daniel Oss (BMC Racing) se convirtió en protagonista a falta de 30 kilómetros para el final ya que no estaba por la labor de quedarse con el resto de ciclistas y comenzó a abrir hueco con respecto al grupo. Ese grupo se fue, poco a poco fragmentando al tiempo que distintos ciclistas empezaron a lanzar ataques para tratar de conectar con Oss. Dylan Van Baarle (Cannondale) y Jürgen Roelandts (Lotto-Soudal) fueron los dos que lo intentaron con más ahínco, pero los arreones, sin embargo, se sucedieron en ese grupo perseguidor, conformándose un grupo de seis ciclistas.
En ese momento, fue Zdenek Stybar el que lo intentó con mayor ímpetu. En el nuevo sector sobre pavés, el grupo de Van Avermaet consiguió recortar más de la mitad de la ventaja que tenía el italiano en cabeza. Finalmente, consiguieron neutralizar la diferencia, y empezaron a pedalear para abrir hueco con el grupo de Boonen y Sagan.
Ataque de Van Avermaet
En Carrefour de l'Arbre, Van Avermaet atacó con fuerza para ir dejando unidades detrás y, al final, conformó un grupo cabecero con dos compañeros de viaje más, el propio Stybar y Sebastian Langeveld (Cannondale), al tiempo que Boonen se hartaba de esperar y lanzaba una ofensiva para ir a por este grupo de escapados, en la que no tuvo fuerza para meterse Sagan.
'El Infierno del Norte' volvió a ser emocionante hasta el final, y no fue hasta los últimos metros cuando se decidió el vencedor. Van Avermaet consiguió entrar en el Olimpo de los ciclistas al ganar su primer 'Monumento', tras quedarse a las puertas la pasada semana en el Tour de Flandes, y sumó su cuarto título de la primavera, tras la Omloop Het Nieuwsblad, la E3 Harelbeke y la Gante-Wevelgem.