El ciclista colombiano Esteban Chaves (Mitchelton-Scott) ha ganado la decimonovena etapa del Giro de Italia, disputada entre Treviso y San Martino di Castrozza sobre 151 kilómetros, siendo el más rápido en una nutrida fuga que contó con el permiso de un pelotón de favoritos en el que Chaves se quita un peso de encima con esta victoria de prestigio.
Después de los problemas de salud --con una mononucleosis-- que le impidieron mantenerse en la élite del cliclismo el año pasado, Chaves, que logra su decimoquinto triunfo en su carrera, volvió a sonreír en la cima de San Martino di Castrozza, en un triunfo peleado ante sus compañeros de escapada.
Los incisivos ataques de Chaves fueron mermando las fuerzas de sus rivales. Segundo en meta fue Andrea Vendrame (Androni), que entró a 10 segundos, y tercero fue Amaro Antunes (CCC Team), con 12 perdidos. Fueron llegando a cuentagotas el resto de escapados, que no pudieron con este Chaves que quiere volver a su mejor versión pero que sigue lejos de ella.
El colombiano, segundo en el Giro de 2016 y tercero en la Vuelta a España del mismo año, no ganaba una etapa desde el Giro de Italia del año pasado, cuando se hizo con la sexta batalla con final en el Etna llegando de la mano de su jefe de filas Simon Yates.
Pero entonces empezó su batalla contra un virus que le provocó esa mononucleosis, también ha pasado por otras lesiones, y días después de cumplirse el aniversario de ese triunfo logra de nuevo subir a un podio. Sin ser el Chaves que maravilló a Colombia y que parecía ser el relevo en vida de Nairo Quintana, de momento suma una nueva etapa a su palmarés en un Giro hasta ahora discreto.
Entre los favoritos, el también colombiano Miguel Angel López (Astana) atacó desde lejos en esa subida final de 3ª categoría --13,6 kilómetros al 5,6% de pendiente media-- y restó 44 segundos al resto de candidatos al 'Top 10', podio y triunfo final en Verona, justo antes de la gran etapa de este sábado.
Esta vez el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) intentó dos ataques al final, ya cerca de la meta y que fuero más bien un cambio de ritmo, que no descolocaron ni al líder Richard Carapaz (Movistar Team), a Vincenzo Nibali (Bahrain Merida) ni a Mikel Landa (Movistar Team), que entraron con el mismo tiempo.
Las fuerzas se reservaron para la gran batalla de este sábado en la vigésima y penúltima etapa, la última de montaña. Será un 'etapón' entre Feltre y Croce d'Aune-Monte Avena sobre 194 kilómetros, con cinco puertos de montaña enlazados y un final en alto en el exigente puerto de 11,1 kilómetros al 5,5% de media pero con rampas por encima del 11% y del 16% en la penúltima subida.
La última opción para marcar terreno y hacer diferencias antes de la contrarreloj final en Verona que decidirá al ganador de este Giro y a los otros dos integrantes del podio. De momento, Richard Carapaz cuenta con 1:54 de margen sobre Nibali, 2:16 sobre Roglic y 3:03 sobre su compañero y ahora escudero Landa, mientras que Bauke Mollema (Trek) es quinto a 5:07, ya demasiado lejos.
