Las estaciones de esquí están en el centro del debate en la Unión Europea, después de que Angela Merkel pidiera un acuerdo común para no abrirlas y evitar posibles contagios por coronavirus.
De momento, Austria y Suiza no están por la labor y, al igual que España, no se plantea prohibir la apertura de sus estaciones de esquí en Navidad 2020 pese a la segunda ola del coronavirus.
En este contexto, Francia quiere convencer a España y Suiza para que se cierren las estaciones de esquí durante las vacaciones de Navidad.
El primer ministro francés, Jean Castex, en una entrevista al canal de televisión BFMTV, explicó que "los españoles y los suizos por ahora no se orientan a esas decisiones, pero la acción diplomática continúa".
Castex contó que ha hablado de esta cuestión con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que le hizo notar que la apertura de las estaciones depende de las comunidades autónomas y que hoy habrá una reunión de concertación en las que se debe examinar la apertura de esas instalaciones.
En Suiza -recordó- esa decisión tampoco es competencia de la federación. Si pese a todo las estaciones en esos o en otros países europeos (Austria podría mantenerlas abiertas durante sus vacaciones de Navidad), "la idea es impedir a los franceses ir a contaminarse".
Para eso el primer ministro concretó los anuncios hechos el martes por el presidente, Emmanuel Macron, y señaló que habrá "controles aleatorios en la frontera" para hacer pruebas y aplicar el aislamiento a los que contra las recomendaciones de su Gobierno se hayan ido a esquiar al extranjero.
"Preferimos una armonización" pero "los Estados que nos rodean son soberanos", comentó.
Recordó que "por ahora" la fecha que baraja su Ejecutivo para reabrir las estaciones francesas es el 20 de enero, una vez que se pueda ver que la epidemia no se ha reavivado con las vacaciones de Navidad.