Joe Anderson, alcalde de la ciudad de Liverpool, reconoce ahora que "no fue inteligente" tener la ciudad "abarrotada de españoles" durante el comienzo de la crisis por el coronavirus.
En torno a 3.000 hinchas del Atlético de Madrid fueron a Liverpool para el encuentro de vuelta de los octavos de final de la Champions League. Todo ello, mientras la crisis del coronavirus comenzaba a ser una realidad y en España se jugaban los partidos de fútbol a puerta cerrada.
En todo Reino Unido los casos de coronavirus alcanzan los 6.500, mientras que los muertos ascienden a 335. Ahora, Anderson señala que "los infectados casi se duplican diariamente aquí como en otros lugares. Todos están y se verán afectados de alguna manera. Por favor, quédense en casa y sigan consejo #savelives".
"Era muy extraño"
Anderson echa la vista atrás y cree que todo fue un error: "Argumentamos en ese momento que era muy extraño que a los fans de Madrid no se les permitiera entrar a su propio estadio, pero que sí pudieran viajar hasta Liverpool e ir a Anfield".
"Creo que el gobierno no tomó medidas firmes lo suficientemente rápido y parecía reacio a hacer algo para preocupar a la gente o afectar la economía en ese momento", lamenta el alcalde de la ciudad de los Beatles.
Reconoce ahora que "no fue una idea inteligente dejar que se jugase el partido y permitir que la ciudad se llenara de fans españoles que se mezclaron con los ciudadanos de Liverpool. No fue culpa de los fans españoles, pero no debería haberse jugado ese partido".