Pinchó el Barça... y pinchó el Atleti. Un punto más de ventaja tienen los azulgranas después de que el Betis derrotara por 1-0 al equipo del Cholo. Canales fue el autor de la diana, de la única diana, de un encuentro que de nuevo va a dejar muy tocado al VAR en su primer curso en LaLiga. Y más que por acción, por su inacción.
Fue en una jugada con Morata de protagonista. Un Morata que, como era previsible, fue titular en un encuentro que, eso sí, tuvo a su primer actor principal al que siempre cumple. Jan Oblak dejó atónitos a todos en el Villamarín. A sus compañeros menos, por lo acostumbrados que están, pero el Betis y su hinchada se quedaron con un 'cómo es posible' en sus caras. La mano del esloveno al cabezazo de Feddal es desde ya una de las paradas del campeonato.
Lo de siempre, como lo de siempre fue un contragolpe con sello Atlético que Morata mandó a las manos de Pau López. Poco más hizo el cuadro rojiblanco, y el verdiblanco, en ataque en un primer acto en el que las defensas se impusieron a los ataques.
Igual pudo ser en el segundo tiempo, pero todo cambió con dos acciones en el área. La primera, un penalti que fue y no se pitó sobre Morata. El VAR, inexistente en una acción clara como el agua en la que Feddal impacta con el delantero rojiblanco antes de tocar la pelota. La segunda, un penalti que fue y sí se pito por unas manos absurdas de Filipe Luis. Canales cogió la pelota y la puso en las mallas de Jan Oblak.
El Betis tenía la mitad del trabajo hecho. El otro 50% era mantener la portería a cero. Griezmann pudo evitarlo, con un disparo bestial desde fuera del área que se estrelló en el palo. Y pudo hacerlo de nuevo, pero estuvo lento en un buen envío de Vitolo en profundidad. No era el día en ataque del Atlético.
Segundo partido perdido del Atlético en toda la temporada y oportunidad perdida para los rojiblancos de ponerse a tres puntos del Barcelona. El VAR, de nuevo en el centro de todas las miradas en un horizonte en el que a los del Cholo les espera el Real Madrid.
