Rakitic derriba el muro del BATE y da los tres puntos al Barcelona

El Barcelona llegaba a Bielorrusia con más que perder que ganar ante el BATE. Sin Messi, todas las miradas estaban puestas en Neymar, la estrella del equipo de Luis Enrique en ausencia del '10'.

Su póker ante el Rayo invitaba a pensar que iba a proseguir su racha en la Champions. El once que sacó Luis Enrique fue de circunstancias, con Mascherano y Busquets en el centro del campo junto a Sergi Roberto. Arriba, se decantó por Munir en vez de por Sandro. Con todo puesto, faltaba que el balón echase a rodar.

Pitó el árbitro y arrancó la tercera jornada de Champions para el Barcelona. Como era de esperar, los primeros minutos fueron del Barcelona, con la posesión y entrando por las bandas con Alves y Alba. Neymar estaba eléctrico, preciso con el balón, punzante, se le veía fino.

El BATE resistió la primera parte

Chernik salvó al BATE del primer gol del Barcelona. Tras una gran jugada ensayada, Munir se puso mano a mano contra el portero, pero sacó el disparo del delantero azulgrana a bocajarro. Llegó pronto el primer contratiempo para el Barcelona.

Sergi Roberto se tuvo que retirar lesionado del campo, otra lesión más para Luis Enrique, que si ya tenía difícil hacer el once antes del partido, lo de rotar se le va a hacer imposible. Entró Ivan Rakitic, que tenía pensado descansar, pero la lesión de su compañero se lo impidió.

Ahí el partido se paró, el BATE lo intentaba, pero era llegar a la frontal del área y las ideas se le apagaban. El Barcelona encontraba las espaldas de la defensa con suma facilidad. En una jugada a balón parado, a punto estuvo de llegar el primer gol.

La tuvo Busquets

Busquets enganchó un centro medido de Neymar, su balón se paseó por la línea de gol y ningún jugador fue capaz de llegar a ese balón. El Barça lo intentó, tuvieron alguna que otra polémica con los jugadores rivales, pero finalmente el partido llegó al descanso con resultado gafas.

Mientras tanto, el otro partido de su grupo, el Leverkusen-Roma, estaba empatado a dos tras empezar ganando el Leverkusen 2-0. La situación estaba extraña, con 45 minutos que podían cambiar todo o no cambiar nada.

Nada más arrancar la segunda parte, se cayó el muro bielorruso. No se cayó, lo derrumbó Ivan Rakitic con un golazo desde la frontal del área que se coló por la escuadra de la portería de Chernik.

Rakitic, el mago

Se le ponían las cosas de cara al Barcelona, que tenía que mantener el dominio mostrado hasta el momento ante un BATE incapaz de hacer cosquillas a los culés. En el otro partido del grupo, la Roma le había dado la vuelta al marcador, poniéndose 2-3.

Si ya lo tenía fácil el Barcelona, una nueva genialidad de Rakitic finiquitó el partido. El croata picó el balón como si llevase el '10' del Barcelona delante del portero y el esférico se coló rozando el palo de la portería. 0-2 para el Barcelona y a pensar en cerrar el partido cuanto antes.

Tres puntos valiosos

Munir se retiró del campo por Sandro, gran trabajo de desgaste del canterano en la presión del equipo. También tuvo su opción Gumbau, el jugador del filial que disfrutó de sus minutos en Champions.

Con poco más se acabó el partido, el Barcelona se limitó a monopolizar la posesión del balón y el BATE se desesperó con un par de entradas feísimas.

Se acabó el partido con ese 0-2 y con los tres puntos que se antojaban fáciles para el Barça antes del encuentro. La única noticia negativa fue la lesión de Sergi Roberto, aunque parece que no será mucho lo que tenga el joven centrocampista culé.