Dani Ceballos puja con Lemar

Publicidad

SU ENTRADA AL CÉSPED CAMBIÓ EL SIGNO DEL ENCUENTRO

Dani Ceballos pide sitio en la medular del Real Madrid tras su gran partido en el derbi ante el Atlético

Cambio radical en la vida de Dani Ceballos en estos últimos meses. De no contar absolutamente nada para Zidane ha pasado a debutar con la España de Luis Enrique y a contar con buenos minutos con Lopetegui en el Real Madrid. El mediocentro está respondiendo a la confianza de su técnico, y contra el Atlético fue, junto a Courtois, el mejor de los blancos.

Dicen que lo importante no es la cantidad sino la calidad. Y si esa frase es cierta, la verdad es que Dani Ceballos pudo marcharse bien contento a casa tras el Real Madrid - Atlético. No por el resultado, pero sí por su actuación personal. No fue titular, pero su entrada desde el banquillo dio un aire nuevo a los blancos. Y también dio la razón a Julen Lopetegui y a Luis Enrique.

El mediocentro cambió el partido. Simplemente. Su entrada, en sustitución de un lesionado Bale, dio frescura, orden y profundidad a un equipo que hasta ese momento estaba pecando de timorato. El 24 rompió el esquema de un Atlético que perdió el control y volvió locos a los rojiblancos.

Ceballos tenía el ritmo. Él marcaba el tempo y manejó el juego del Real Madrid. Con velocidad o con pausas, con más o menos toques, era el dueño de la medular. Saúl, Koke, Rodrigo y Thomas, quien entró por Costa para, precisamente, parar al andaluz, apenas pudieron contener las ideas futbolísticas del andaluz.

Se movió como quería. Organizó como quería y movió con criterio el cuero ofreciento un porcentaje de acierto en el pase de más del 90%. Pocos errores, seña de identidad de un mediocentro, y la confianza de un futbolista que, con Julen Lopetegui en el banquillo y con la convocatoria de Luis Enrique con España, ha dejado atrás el ostracismo sufrido con Zidane.

Parece un futbolista completamente nuevo, y es que muchas veces es la cabeza la que manda. Ahora a buen seguro querrá más, y el primer paso para pedir tener más minutos ya lo ha dado: partidazo en el Santiago Bernabéu, ante su público y contra un rival de la talla física del Atlético de Madrid.

Publicidad