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COPA DEL REY | LEGANÉS 1 - 3 VALENCIA
Un efectivo Valencia acaricia el pase a octavos ante el Leganés
El Valencia ha dejado encarrilado su pase a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey tras vencer en Butarque al Leganés (1-3) en un partido que se le complicó al equipo ché en la segunda parte, pero que supieron resolver gracias a un gol de Bakkali,
El Valencia dejó encarrilada su eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey contra el Leganés, tras un duelo que se le complicó en la segunda parte pero que selló con una diana postrera de Bakkali.
El Leganés llegaba casi en shock después de una semana en la que había perdido para toda la temporada por lesión al extremo Rober Ibáñez y al portero Jon Ander Serantes. Junto a ellos, en la enfermería, otro nutrido grupo de jugadores.
La situación obligó a técnico Asier Garitano a alinear de salida un once en el que debutaba el canterano Sergi Segura y donde algunos hombres con minutos en las jornadas precedentes como Mantovani y Alberto Martín ocupaban plaza en el banquillo.
Prandelli, por su parte, necesitado de un triunfo que calmase el entorno, repitió el esquema táctico del Sánchez Pizjuán pero con tan sólo cinco de los titulares ante el Sevilla (Mangala, Garay, Abdennour, Parejo, Mario Suárez y Nani). Si había dudas sobre el rendimiento de los visitantes por su mal momento, estas quedaron aniquiladas en apenas tres minutos.
Munir abrió la lata
Con los equipos aún aclimatándose, un balón largo de Montoya a espaldas de la defensa lo controló con acierto Munir, -titular en esta ocasión tras marcar el único gol en Sevilla-, antes de llevarla al fondo de las mallas.
Un golpe duro para el Leganés, a quien no le quedaba más remedio que activarse para evitar que lo anecdótico se convirtiera en rutinario. Ayudó a ello la velocidad y la verticalidad de Machís. El venezolano fue protagonista de las dos primeras acciones ofensivas de los suyos. En una de ellas como finalizador, llegando al segundo palo para rematar forzado y fuera un gran centro de Víctor Díaz. Más tarde como creador y asistente cuando se adentró en el área por su costado asistiendo atrás para Omar Ramos, que remató desviado según le venía.
Los sustos despertaron de nuevo al Valencia, que poco a poco recuperó las riendas de su destino. Nani, capaz de que lo complicado parezca sencillo, se inventó una chilena desde la frontal que acabó tocando en el palo. Al aviso le siguió el segundo. Montoya, cómodo por su costado durante toda la primera mitad, se encontró con espacio para progresar y con tiempo para servir un esférico impecable a la cabeza de Medrán. No desaprovechó el obsequio y lo colocó lejos del alcance de Brignoli.
Lo dejaron encarrilado
Sufría el anfitrión pero eso no iba en menoscabo de su voluntad por competir y plantar cara. Un saque de esquina de Omar lo ganó por aire el central Pablo Insua obligando su testarazo a una meritoria intervención de Domenech. Pese al resultado ese intento permitió que los blanquiazules se marcharan al descanso esperanzados en poder recortar la distancia. No tardaron mucho en hacerlo.
Tras un primer cuarto desde la reanudación donde lo más relevante fue un tanto anulado al Valencia por posible falta sobre Brignoli, se modificó el panorama. El motor del cambio, otra vez Machís. El 'siete' recibió al borde del área, desmontó a la zaga che con un excelente movimiento y golpeó con furia impactando el balón en el palo antes de alojarse en el fondo de las mallas.
Hecho lo más difícil, meterse en el duelo, tocaba llamar al corazón. Y el del Leganés siempre bombea cuando se le necesita. Los 'pepineros' comenzaron a asomar con recurrencia por el área contraria y rozaron el empate cuando Rubén Pérez ejecutó un libre directo lejano que rozó el larguero.
Entró Luciano arriba para aumentar el desconcierto y siguieron cayendo las ocasiones, esta vez con Gabriel poniendo un pase tenso que no desvió nadie. Pero cuando todo parecía que acabaría en 1-2, Bakkali encontró un hueco por el costado zurdo y su disparo, que pasó entre las piernas de Brignoli, dio a los valencianistas una ventaja que les permite afrontar con tranquilidad el partido de vuelta.
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