España naufraga ante Suiza en la Romareda y se jugará el primer puesto en Portugal

Casi un año después llegó la derrota de España en un partido oficial, en aquel lejano 10 de octubre de 2021 fue Francia quien venció a la Selección para llevarse la Nations League. Hoy, en la Romareda, fue Suiza el verdugo de un equipo que falló mucho en la defensa a balón parado y que tampoco asedió a un equipo que se replegó a la perfección.

Una sorprendente y constante presión arriba de Suiza incomodó el arranque de partido para los de Luis Enrique, que tuvieron muchos problemas para sacar el balón y especialmente para entrar en la telaraña defensiva de la selección helvética.

En los primeros 45 minutos vimos muy poco a los extremos españoles, Ferran y Sarabia, muy pegados a banda, no exigieron a la zaga visitante, y un Asensio motivado, con energía y participativo, no fue suficiente para meter miedo a una Suiza que iba estando más cómoda a medida que pasaban los minutos.

La realidad es que las ocasiones llegaban por parte de los visitantes, no necesitaron mucho para dar un par de sustos a la Selección y en el primer córner que disfrutaron aprovecharon para ponerse por delante gracias a un gran remate de cabeza de Akanji. La Romareda reaccionó y se volcó con los suyos, aunque no valió para poner las tablas antes del descanso.

Asensio brilló y España tropezó dos veces a balón parado

Una gran jugada individual de Asensio brindó en bandeja el empate a Jordi Alba en la segunda parte en lo que parecía el primer paso de la reacción española. Lejos de la realidad, Suiza, sin apenas despeinarse, forzó otro córner y volvió a castigar a una defensa que pecó de blanda en los balones aéreos, el tanto de Embolo dio a Suiza una histórica victoria a los suyos, que nunca habían ganado en territorio español y que evitan bajar al Grupo B.

Mientras tanto, España se mete en un problema ya que tendrá que ganar sí o sí a Portugal en Braga el próximo martes si quiere ser primera de grupo. Los lusos ofrecieron su mejor cara en la goleada ante la República Checa en Praga por 0-4, y sin goles de Cristiano.

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