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LIGA BBVA JORNADA 12 | ESPANYOL 2 - 0 MÁLAGA
Hernán Pérez sentencia al Málaga en Cornellá
Dos dianas de Hernán Pérez, una en el minuto 5 y otra en el 19, sentenciaron al Málaga en Cornellà-El Prat y dieron la victoria al Espanyol en un choque en el que los pupilos de Javi Gracia disfrutaron de muy pocas ocasiones, las más claras frustradas de forma magistral por el portero Pau López.
El anfitrión, con una versión muy sólida, tomó las riendas del encuentro muy pronto, después de unos instantes de desconcierto con presencia del Málaga, con urgencias, en el área. Hernán Pérez, protagonista, tardó cinco minutos en adelantar a los catalanes en el marcador, tras recortar a Weligton y superar a Kameni con habilidad.
El conjunto de Sergio González era ágil con el balón y serio sin la posesión. Los andaluces, por su parte, sufrían para superar las líneas del anfitrión, bien apuntaladas. Los de Javi Gracia no tenían apenas oportunidades de gol. La más clara fue un disparo de Amrabat, en el 18, tras un error en defensa: Pau sacó una mano salvadora.
Pero este aviso no dio alas al Málaga, todo lo contrario. Hernán Pérez, de nuevo, se puso bajo los focos. En la siguiente acción, el internacional paraguayo batió de nuevo al portero camerunés, que tocó el balón, sin evitar el segundo de la noche. El centrocampista conectó un centro de Fuentes desde la izquierda.
Gran versión del Espanyol
El anfitrión insistía en engordar el marcador. Lo intentó con un remate de Roco a la media hora, que se fue por encima del larguero. El cuadro visitante buscaba el gol sin demasiada fluidez, aunque en las jugadas en largo pudo sacar petróleo. Charles se quedó solo en el punto de penalti ante Pau, pero también era la noche del meta.
En la reanudación, el Espanyol parecía dispuesto a minimizar sus riesgos. El Málaga, por su parte, exhibía más fluidez en la circulación del balón. Pese a que los catalanes presentaban peligro a la contra, la iniciativa era andaluza en esta segunda mitad. La mejor baza de los de Javi Gracia eran las jugadas desde la bandas.
Colgar balones al área parecía la mejor forma de sorprender a la zaga y en el minuto 65 estuvieron cerca de lograrlo. Charles culminó la jugada, aunque su remate de cabeza salió desviado. Poco a poco, el Espanyol perdía intensidad y tensión competitiva. En su intento de dormir el partido, los pericos también bajaron sus propias revoluciones.
No lo consiguió el Málaga
La prueba más clara fue un despiste de Roco en el 72, que fabricó sin quererlo un dos contra dos para el Málaga. Charles, otra vez, robó el balón y se lo entregó a Horta, que no pudo controlarlo con claridad. Aunque esta vez el Espanyol no quería sorpresas en su estadio.
El partido estaba finiquitado y sus futbolistas arañaban segundos en cada acción. Sin prisas, riegos ni urgencias. No era necesario. Los tres puntos se quedan en casa, mientras que el Málaga deberá seguir buscando oxígeno lejos de Cornellà-El Prat.
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