Una treintena de hinchas radicales del Sevilla se personaron este lunes en la Ciudad Deportiva del club, donde el equipo entrenaba a puerta cerrada, para pedir explicaciones a la plantilla por la mala trayectoria del equipo, que lleva cinco partidos de LaLiga sin ganar, con un empate y cuatro derrotas.
A pesar de ser cerrado al público, estos aficionados acudieron a las instalaciones de entrenamiento del Sevilla, al comienzo de la primera sesión de la semana, rebasaron el primer puesto de control y se dirigieron hacia las inmediaciones de la nueva tribuna de la Ciudad Deportiva, en la que estuvieron cerca de media hora.
Un punto de quince posibles
Una vez allí, estos seguidores reclamaron hablar con los capitanes del equipo sevillista, algo que pudieron llevar a cabo después de un rato de espera, ya que, según testigos presenciales, estuvieron conversando con una representación de la plantilla.
También tuvieron una pequeña charla con el director deportivo del club, Óscar Arias, mientras que, como medida de prevención, varios furgones de la Unidad de Intervención Policial (UIP) -antidisturbios- de la Policía Nacional llegaron a la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios.
Posteriormente, este grupo de aficionados abandonó la zona en la que hablaron con esos futbolistas y, bajo la vigilancia de la Policía, se marcharon de la instalación, sin que en ningún momento se produjeran incidentes o momentos de tensión.