El París Saint-Germain se llevó un varapalo en la Copa de la Liga de Francia al perder 1-2 ante el Guingamp, colista de la Ligue 1 y capaz de eliminar al equipo dirigido por el alemán Thomas Tuchel con un gol de penalti en el minuto 93 de Marcus Thuram, hijo del mítico Lilian Thuram.
Hasta este miércoles, el todopoderoso PSG sólo había perdido un partido oficial en toda la temporada, en la fase de grupos de la Liga de Campeones contra el Liverpool por 3-2.
El París Saint-Germain encarriló su clasificación para las semifinales con un gol de Neymar en el minuto 63, de cabeza, tras un centro del belga Thomas Meunier desde la banda derecha. Pero ese tanto del brasileño, el primero después de casi dos años con la testa, fue un espejismo.
Los hombres de Tuchel se las prometían muy felices y bajaron los brazos hasta caer en el abismo. En los últimos minutos, dos penaltis sentenciaron las ilusiones del PSG de hacer pleno de títulos este curso.
Primero, en el minuto 81, el congoleño Yeni N'Gbakoto empató el choque y después, en el último instante, Thuram no falló en la segunda pena máxima que transformó el Guingamp, que dio el sorpresón de los cuartos de final.