Fútbol | Inglaterra
Joey Barton, exfutbolista inglés, declarado culpable de patear la cabeza de su mujer
El exfutbolista del Manchester City fue declarado culpable de agresión a su mujer. "La agarró, la empujó al suelo y le dio una patada en la cabeza", indicó la fiscal, Helena Duong.
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Joey Barton, exfutbolista inglés de 42 años y que jugó cinco temporadas en el Manchester City (2002 - 2007), ha sido declarado culpable y condenado a una pena equivalente a 12 semanas de cárcel por agredir a su mujer en su domicilio de Londres en junio de 2021, aunque no ingresará en prisión, según informan los medio británicos.
El centrocampista nacido en Huyton, Liverpool, el 2 de septiembre de 1982, pateó en la cabeza a la que todavía es su pareja, Georgia Barton, lo que le provocó un chichón y sangrado en la nariz, después de haber estado bebiendo alcohol con otras parejas mientras sus hijos dormían. Según el relato de los hechos, Georgia, que no apoyó los cargos, llamó a la Policía tras el incidente entre lágrimas y diciendo que su marido acababa de pegarle, aunque después envió una carta a la Fiscalía en la que se retractó de esas acusaciones y en la que señalaba que se encontraba en estado de embriaguez.
La fiscal Helena Duong, sin embargo, ha defendido ante el Tribunal de Westminster que la llamada "era una prueba convincente" de la agresión, ya que esta la había descrito "en términos claros", y añadió que Georgia "no estaba tan afectada por el alcohol como ella y Joey habían asegurado".
"La agarró, la empujó al suelo y le dio una patada en la cabeza", ha sostenido Helena Duong. La nariz ensangrentada de Georgia era, a juicio de Duong, "una lesión que realmente requiere una explicación" y que fue, "claramente, algo no causado por un accidente", mientras que Joey reconoció en el juicio que hubo una discusión con su pareja, pero negó el contacto físico.
El juez Paul Goldspring calificó la versión del exfutbolista de "falsa e imprecisa" y le condenó al equivalente a 12 semanas de prisión, aunque no ingresará en el centro penitenciario, ya que el magistrado argumentó que no quiere interferir en la "relación feliz" que mantiene con su esposa y sus hijos. Por el contrario, sí ha sido condenado a pagar 2.183 libras (2.616 euros) en concepto de indemnización a la víctima y de costos del procesamiento.
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