El Kashima Antlers dio la vuelta a la ventaja que dispuso el Chivas Guadalajara en la primera parte para alcanzar el triunfo y situarse en las semifinales del Mundial de Clubes 2018, donde se reencontrará con el Real Madrid.
El campeón asiático, dos años después, coincidirá de nuevo en este torneo con el conjunto español, campeón de Europa. Entonces, el Kashima ejerció de anfitrión en la edición del 2016 y discutió al Real Madrid el título en la final que, tras la prórroga, conquistó el equipo entonces dirigido por Zinedine Zidane.
En esta ocasión el Kashima está presente en el torneo por méritos propios. Como el mejor conjunto de Asia. Buscará la revancha, en semifinales, contra el cuadro de Santiago Hernán Solari, el próximo miércoles. Será el debut del vigente campeón europeo.
El Kashima Antlers aprovechó su buena segunda parte para dejar al margen del torneo al equipo mexicano, debutante en un Mundial de Clubes. Y eso que el Chivas Guadalajara afrontó el choque con las ideas claras y fue muy superior a su rival, especialmente en la primera parte.
El vencedor de la Liga de Campeones de la CONCACAF se topó con el partido de cara desde muy pronto. A los tres minutos, un pase por la izquierda de Isaac Brizuela fue rematado de cabeza por Ángel Zaldívar, que abrió el marcador y puso en ventaja a su equipo. La intensa presión ejecutada por el combinado de Jose Saturnino Cardozo maniató al campeón asiático. El Guadalajara apenas dio opción a su rival japonés.
En el tramo final antes del descanso el Chivas pudo ampliar su renta. Careció de acierto. Zaldívar, en el 38 tuvo el segundo pero su tiro fue detenido por el portero Kun Sun Tae, el mejor de su equipo. Y al borde del intermedio Orbelín Pineda estrelló en el travesaño un balón que le proporcionó Eduardo López.
El Kashima había alcanzado vivo el intermedio. El partido dio un giro al inicio de la segunda parte. El equipo japonés equilibró la situación en la primera ocasión que dispuso. Salió de la presión el Kashima. Shoma Doi recibió la pelota dentro del área y encontró a Ryota Nagaki, que aprovechó el agujero en la zaga mexicana para enviar el balón a la red y establecer la igualada en el minuto 49.
El tanto desorientó al Chivas de Guadalajara, que perdió el control del duelo ante la velocidad nipona. A la hora de juego, una falta dentro del área de Michael Pérez a Shuto Yamamoto fue indicada como penalti. El brasileño Serginho no falló desde los once metros y puso por delante al Kashima Antlers. Cardozo recurrió a Walter Sandoval para intentar enmendar la situación.
Pero el partido estaba roto y en pleno caos fue el Kashima el beneficiado. Pero en el tramo final sentenció el Kashima con un gran gol de Hiroaki Abe que, dentro del área, efectuó un tiro inteligente, a la escuadra, imposible para el meta Raúl Gudino.
Los instantes finales recobraron la emoción gracias al videoarbitraje, que rectificó al árbitro e indicó como penalti una falta de Shuto Yamamoto. Alan Pulido ejecutó desde los once metros pero Kwon desvió. El delantero recogió el rechace y lo envió a la red para situar el partido con 3-2.
Lo intentó hasta el final de forma desesperada el representante mexicano, pero le faltó tiempo y precisión para evitar que el Kashima se situara en semifinales y se citara con el Real Madrid.