El Chelsea completó en la tanda de penaltis la final inglesa de la Liga Europa, que disputará al Arsenal, tras derrotar al Eintracht de Frankfurt en una tanda en la que el héroe fue Kepa Arrizabalaga.
Los 'Blues' se adelantaron en el marcador por medio de Ruben Loftus-Cheek, pero vieron cómo el Eintracht les empató por medio de Luka Jovic (1-1) y llevó el encuentro a los penaltis, donde pese al fallo de César Azpilicueta, dos paradas de Kepa metieron al Chelsea en la final (4-3). El Chelsea tendrá la oportunidad de volver a levantar un trofeo que ya ganó en 2013, entonces bajo el mando de Rafa Benítez.
La mejor noticia de este jueves para el Chelsea y para Stamford Bridge fue la decisión de Maurizio Sarri de dejarse de experimentos y meter de inicio a Eden Hazard. En la ida, prescindió de él y este fin de semana en la Premier League el belga se reivindicó con dos asistencias que le convierten, con 15, en el mejor pasador de la liga inglesa.
Hazard, esta vez en el campo desde el principio, tardó poco en sacar el catalejo y volver a vislumbrar con sus pases el camino del Chelsea. Pasado el minuto 28, Hazard aguantó varias tarascadas de los alemanes tirado a banda izquierda y tras darse la vuelta encontró por dentro a Loftus-Cheek.
El centrocampista recibió muy fácil en el área, se acomodó la pelota para el interior de la pierna derecha y definió delante de Trapp con total normalidad (Minuto 28). Puso la eliminatoria 2-1 a favor de los ingleses en el global y obligó al Eintracht a dar un paso adelante.
Los 'Blues' tuvieron contras para finiquitarlo, pero Giroud no estuvo acertado y Hazard salió del plano. Los alemanes no llegaban con mucho peligro, pero Jovic no necesitó de demasiado para demostrar su impecable definición. El serbio bajó con el pecho un envío lateral de Hasebe.
En la frontal lo recibió Gacinovic, que le devolvió la pared a Jovic mientras David Luiz se quedaba fuera de lugar, dejándole el carril libre a Jovic para rematar ante Kepa (minuto 49). El encuentro se abocaba a la prórroga, intimidado por dos equipos a los que parecía valerles el resultado neutral.
Incomodados los ingleses por la solidez de los alemanes y amenenazados los germanos por la calidad arriba de los londinenses, la segunda mitad fue un intercambio de fuerzas que terminó en la prórroga. Ahí, el Eintracht rozó el triunfo. Primero con un remate defectuoso de Haller que sacó David Luiz bajo palos y más tarde con un remate de cabeza que Zappacosta, a la desesperada, volvió a negar bajo la madera.
El italiano fue el único que lo probó para el Chelsea en la prórroga y se encontró con una gran parada de Trapp. En el córner posterior, el árbitro anuló un tanto a Azpilicueta por falta al portero de los alemanes. Se agotaron los 120 minutos y los penaltis, verdugos del Chelsea en la final de la FA Cup, decidirían el acompañante del Arsenal en Europa.
No fallaron Jovic y Haller, ni Barkley para el Chelsea, pero cuando Azpilicueta impulsó el esférico se encontró con una fantástica estirada de Trapp. De Guzmán acertó, Jorginho, con sangre fría, también. El Chelsea necesitaba un fallo y Hinteregger disparó mal, pero Kepa le aguantó bien y detuvo el balón clavándolo al suelo con la rodilla derecha.
David Luiz hizo buena la parada del cancerbero empatando la tanda y Kepa respondió con otra parada a Gonçalo Paciencia. En el que puede ser su último servicio en Stamford Bridge, Hazard remató la tanda y mandó al Chelsea a Baku, donde el próximo 29 de mayo buscará el título continental.