El Valencia se reencontró este domingo con la victoria tras cuatro empates consecutivos al superar (2-0) al Athletic Club en un partido en el que los vizcaínos mostraron un juego inofensivo ya que solo en la reta final del choque inquietaron la meta valencianista. A pesar de la victoria, el Valencia sufrió en los último tramo el acoso final del Athletic aunque los locales aprovecharon una contra para matar el partido en el 89.
El partido arrancó con un Valencia dubitativo ante un rival que se hizo con la posesión del balón en los primeros instantes del choque en el que el Athletic parecía estar más fresco. Sin embargo, serían los de Mestalla los que poco antes de llegar al cuarto de hora de partido disfrutaría de las mejores opciones para abrir el marcador por mediación de Cherishev y Wass. Antes, Raúl García reclamó penalti en una acción con el valencianista Diakhaby.
Cuando el partido se acercaba a la media hora ninguno de los dos equipos mandaba sobre el terreno. El partido estaba abierto,con aproximaciones a las porterías de Neto y Herrerín, pero sin que los atacantes lograsen resolver.
El encuentro mantuvo su intensidad hasta llegar al descanso pero sin la profundidad necesaria en ambos bandos para lograr que el marcador se moviera en la primera parte. En ese apartado la zaga valencianistas logró neutralizar a los siempre activos Munain y Williams y el Athletic lo acusaba en su juego.
El Valencia salió con mucha fuerza en el segundo tiempo y a los tres minutos de reanudarse el choque encontró premio con un golazo de volea de Rodrigo de Moreno desde el borde del área tras un pase de cabeza de Santi Mina para culminar una buena jugada de los valencianistas.
El gol cambió ligeramente el guión del partido. El Athletic trataba de reaccionar pero el Valencia se replegaba bien y no le cedía espacios a su rival para atacar. Aunque el Athletic trataba de revertir la situación, su juego en ataque era muy espeso y, al igual que había sucedido en el primer periodo, el control que ejercía la zaga valencianista sobre Muniain y Williams pasaba factura al rendimiento del conjunto vizcaíno.
En la recta final del partido el Athletic, más fresco, se hizo con el control del balón ante un Valencia replegado que trataba de que ni le pasase factura el desgaste del partido de Copa del jueves ante el Betis. La presión visitante se incrementaba conforme se acercaba el minuto final del choque ante un Valencia al que le faltaba fondo y se empezaba mostrar excesivamente fallón principalmente con errores en el pase.
Pero cuando peor lo estaba pasando el equipo de Marcelino, en una contra logró matar el partido con un gol de Kevin Gameiro a pase de Carlos Soler en el minuto 89.
