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ENCERRADOS EN UNA CUEVA EN TAILANDIA
Las dos opciones que se manejan para el arriesgado rescate de los niños ante la inminente llegada del monzón
"Esa cueva se va a llenar de agua", nos contó Frank Cuesta. O se les saca buceando, o se vacía el agua de la cueva: la complicada situación en la que se encuentran los 12 niños y el entrenador atrapados en Tailandia ha hecho que las opciones para sacarles se reduzcan a dos. Roberto Brasero nos cuenta que las lluvias torrenciales del monzón llegarán a la zona de la cueva este fin de semana, con previsión de 100 litros por metro cuadrado.
Los equipos de rescate han conseguido rebajar el nivel del agua en el comienzo de la cueva en la que se encuentran los niños y su entrenador en un 40%, pero queda el tramo más complicado.
Sólo queda el 15% de oxígeno dentro de la cueva y la opción de buceo se complica dada la poca visibilidad y a la nula experiencia de los pequeños.
Otra opción incluso podría ser cavar un túnel desde la superficie, pero hay un kilómetro de roca maciza hasta llegar donde se encuentran los 12 niños atrapados. Esas son las opciones de una operación de rescate en la que se lucha contra el reloj y contra los elementos.
Uno de los buzos ha fallecido en las labores de rescate, siendo la noticia trágica de unas operaciones que, casi dos semanas después de empezar, se presentan en su momento más delicado.
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