El Barcelona salió al Camp Nou con la intención de solucionar lo antes posible el último partido del año. Los de Valverde eran dueños por completo de la posesión del balón ante un Alavés que no le perdería la cara al encuentro.
El impulso del Barça en los primeros minutos le permitió adelantarse en el marcador con el tempranero gol de Antoine Griezmann. El francés aprovechó un buen pase de Luis Suárez para conectar un gran derechazo ante el que nada pudo hacer Pacheco. El Barça ponía el primero en el marcador.
El partido se iba al descanso cuando Arturo Vidal, titular hoy ante el Alavés, amplió la ventaja en el marcador. El chileno pide minutos a Valverde marcando goles cada vez que tiene la ocasión. Los azulgrana ponían tierra de por medio.
El Alavés plantó cara
Tras la reanudación llegaron los mejores minutos del Alavés, que recortó diferencias e incluso tuvo ocasiones para empatar. Los de Vitoria iban a encontrar el premio al empuje en el minuto 56. Pere Pons era el encargado de poner el 2-1 en el marcador y provocar el nerviosismo en las gradas del Camp Nou.
El Alavés lo siguió intentando durante los minutos posteriores al gol, pero el Barça consiguió despertar a tiempo. Corría el minuto 69 cuando Leo Messi conectaba un gran zurdazo desde fuera del área que se colaba en la meta defendida por Pacheco. El argentino ponía el 3-1 y la tranquilidad volvía a Barcelona.
Todavía quedaba el gol de Luis Suárez. El uruguayo transformó un penalti señalado por manos de un defensor alavesista con la ayuda del VAR. El Barcelona redondeaba la goleada y certificaba su liderato de cara a la entrada del año 2020. Si el Madrid no es capaz de ganar mañana al Athletic, los de Valverde serán líderes de LaLiga en solitario.
