Sergi Enrich rescata un punto para el Eibar ante un Levante al que se le hizo largo el partido

El Levante no pudo pasar del empate (2-2) ante el Eibar en el Ciutat de València en un duelo en el que los locales tras una primera parte igualada perdonaron a su rival en la primera media hora de la segunda mitad y acabó por firmar un empate en un partido en el que fue superior al conjunto vasco.

Tras llegar al descanso con victoria por 2-1, en el arranque de la segunda parte y hasta bien entrado este partido el Levante se hartó de acumular ocasiones ante Dmitrovic y acabó pagando muy caro su falta de precisión.

A pesar de que el Eibar parecía haber salido con las ideas más claras, fue el Levante el que abrió el marcador a las primeras de cambio, ya que a los cinco minutos de partido José Luis Morales culminaba un contragolpe perfecto de los locales.

El gol dejó un poco tocado al Eibar, que vio como el Levante pudo marcar el segundo un minuto después pero Morales, en una buena posición para disparar, optó por regalar el balón a Borja Mayoral pero un defensa visitante se anticipó y desbarató la ocasión.

El Eibar asumió ligeramente el control del balón con un Levante que buscaba el contragolpe pero sin que en ninguna de las dos porterías se registrase peligro hasta que en el minuto 19 el equipo de Mendilibar equilibraría el marcador. Un mal despeje de la zaga local tras un buen centro de Pedro León al centro del área, fue aprovechado por Escalante, que remató con la izquierda para batir a Aitor desde dentro del área.

Con el partido muy abierto y sin un claro dominador un nuevo contragolpe del Levante culminaba en el segundo gol de los valencianos, obra de Rochina, justo en la siguiente jugada en la que el Eibar desaprovechó una gran ocasión para marcar.

El partido cobró una gran intensidad, de nuevo con el Eibar presionando y generando ocasiones de peligro con un balón al larguero en la meta del Levante que había recuperado su estrategia de robar y corre, si bien al descanso se llegó con la ventaja levantinista.

El Levante salió con más intensidad que el Eibar en el segundo tiempo. A pesar de ir por debajo en el marcador, al equipo eibarrés le faltó el empuje y la claridad de ideas de las que hizo en los primeros 45 minutos. Conforme avanzaba el encuentro el juego se endureció con continuas faltas en ambos bandos pero el Levante se mantenía firme hasta lograr hacerse con el partido y suyas eran la mejores ocasiones, en especial una de Morales en la que estrelló el balón al palo en el 60 y la más clara de todas en la que Moses falló a portería vacía.

El Levante no paraba de rondar el tercero pero no lograba definir en sus llegadas ante la meta de un Eibar que nada tenía que ver con el que inició el partido y que apenas incomodaba las inmediaciones del área.

Sin embargo, después de que el Levante desaprovechase sus numerosas ocasiones para sentenciar el partido y de que el Eibar reaccionase en el último cuarto de hora y se fuese a por el gol, el cuadro visitante acabó por lograr su objetivo tras un grave fallo de Luna en el área local del que se aprovechó Sergi Enrich para batir a Aitor en el 78.

El gol desencajó al Levante, mientras que el Eibar dio continuidad a su reacción poniendo en apuros ahora la meta levantinista en busca de un gol que le diera los tres puntos en juego, aunque finalmente el encuentro se resolvió con la igualada dos tantos.