El argentino Leo Messi y el uruguayo Luis Suárez, con dos goles en la primera mitad, permitieron al Barcelona llevarse con sufrimiento la victoria de Getafe (1-2), puesto que el equipo madrileño, que redujo distancias antes del descanso, tuvo ocasiones muy claras para empatar en la segunda parte.
El Coliseum Alfonso Pérez presentó su primer lleno de la temporada para recibir al Barcelona en una noche mágica que siempre es especial para el aficionado azulón, que desde hora y media antes del comienzo del partido ya hacia larguísimas colas para entrar al estadio.
Ernesto Valverde sorprendió con la presencia en su once titular del lateral derecho Sergi Roberto, ya recuperado de una lesión, y también del brasileño Arthur, que dio descanso en el centro del campo a Sergio Busquets. Sin embargo, el gran protagonista al principio del choque fue el francés Ousmane Dembelé, que realizó una jugada personal en la que se fue de varios rivales para levantar por primera vez al público de sus asientos.
Tras unos primeros minutos de incertidumbre el Getafe tomó las riendas del partido y en pocas jugadas puso a prueba al Barcelona con un remate alto de Ángel, un gol anulado a Mata por falta previa y varios acercamientos colectivos que obligaron a participar a Ter Stegen.
Cuando peor lo estaba pasando el Barcelona apareció el jugador más determinante, Leo Messi, que aprovechó una indecisión de Djené y Cabrera para recibir un balón escorado a la izquierda y cruzarlo con acierto al fondo de las mallas. El gol le hizo mucho daño al Getafe, que perdió la posesión y se vio durante bastantes minutos asediado por su rival, que comenzó a encadenar acercamientos muy claros de gol, como un remate cruzado de Luis Suárez que sacó por bajo David Soria.
A los 25 minutos el portero madrileño, el mejor de su equipo en toda la noche, también fue protagonista porque salvó al Getafe con un despeje en línea de gol tras un remate de Piqué dentro del área pequeña. La insistencia del Barcelona encontró premio con el segundo gol, obra del uruguayo Luis Suárez, que remató de volea un balón en la frontal que se coló por el costado izquierdo de la portería azulona.
Al equipo catalán le duró poco la alegría porque el Getafe, en un alarde de garra, se marchó decidido al ataque. Pudo marcar primero con un remate de Arambarri que tocó en Jordi Alba y se fue a un poste, pero lo hizo después, dos minutos antes del descanso, cuando Mata aprovechó un balón en el segundo palo centrado desde la derecha por Ángel para anotar a puerta vacía.
En la segunda parte el partido comenzó con un ritmo frenético que se tradujo en ocasiones en ambas áreas. La primera en la del Barcelona con un remate cruzado de Ángel en el mano a mano con Ter Stegen y la segunda con un balón que dejó muerto Cabrera en el área del Getafe para que Messi, solo, rematara a las manos de David Soria.
La entrada de Jorge Molina en el Getafe le dio otro aire al ataque del Getafe, que mejoró mucho sus prestaciones ofensivas e, inexplicablemente, no empató el partido tras una ocasión muy clara de Jaime Mata que se fue de varios defensores, también de Ter Stegen y solo, a puerta vacía, mandó el balón alto.
Valverde, con el miedo en el cuerpo viendo que su equipo perdía el control del esférico, puso sobre el césped a Sergio Busquets, pero la energía que demostró el Getafe fue insuficiente para frenar las embestidas de su rival. Aún así, en los minutos finales el Barcelona también tuvo sus ocasiones para marcar el tercero en las botas de Messi, que se topó primero en un mano a mano con David Soria y después otra vez con el portero madrileño, que sacó una parada salvadora a disparo desde fuera del área.
Con esta victoria, el Barcelona sigue líder en solitario con 40 puntos, cinco más que el segundo, el Atlético de Madrid. El Getafe, por su parte, se queda con 25 puntos a uno de la sexta plaza que ocupa el Betis y da acceso a la Liga Europa.