Fútbol
El momento en el que Dibu Martínez enloquece y se va a por un policía en Maracaná
El portero argentino trató de defender a los aficionados en la grada de Maracaná y se fue a por un policía. Los miembros de seguridad tuvieron que frenar al Dibu Martínez.
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La previa del Brasil - Argentina quedó marcada por la batalla campal registrada en la grada de Maracaná. Una pelea entre aficionados brasileños y argentinos acabó derivando en una dura carga policial contra los hinchas de la Albicelsete. La tensión fue máxima y los jugadores de la actual campeona del mundo, con Messi a la cabeza, fueron hasta la grada donde estaba ocurriendo todo para tratar de calmar los ánimos.
La situación estaba fuera de control y los jugadores de Scaloni trataban sin éxito de que la calma regresara al estadio brasileño. En mitad de tanta tensión, Dibu Martínez perdió la calma y se fue a por un policía que cargaba con su porra contra aficionados argentinos. El portero del Aston Villa, que trataba de proteger a los aficionados, tuvo que ser frenado por miembros de seguridad de Maracaná.
Una imagen insólita y que muestra el bochorno que acaeció en Maracaná. La situación era tan explosiva que Leo Messi ordeno la retirada a los vestuarios, lo que provocó que el partido comenzara con media hora de retraso. El propio Messi criticó tras el duelo la actuación policial y explicó que había familiares de los jugadores en la grada en la que se vivieron las cargas policiales.
"Mal, obviamente que mal. Veíamos como le estaban pegando a la gente, como pasó en la final de la Libertadores, reprimiendo a la gente con los palos. Había jugadores que tenían familia ahí y obviamente la gente piensa en la familia. El partido es secundario. Nos retiramos para que se tranquilizara todo un poco. Podíamos hacer poco y veíamos como le pegaban a la gente", afirmó Leo Messi.
En lo puramente deportivo, Argentina se impuso a Brasil con un solitario gol de Otamendi de cabeza, un resultado que permite a a Argentina mantenerse como líder en la clasificación de las eliminatorias al Mundial de 2026 y agrandar la crisis que vive la Canarinha, que nunca había perdido tres partidos seguidos en unas eliminatorias.
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