El italiano Vincenzo Montella, nuevo entrenador del Sevilla, afirmó en su presentación que su objetivo, al aceptar esta "increíble oportunidad", "es ganar más como técnico, y éste es un club ideal para expresar" sus ideas, y proclamó que quiere que sus equipos jueguen "con espíritu y pasión".
En la sala de prensa del Ramón Sánchez Pizjuán, Montella, que ha firmado por una campaña y media, hasta junio de 2019, en sustitución del argentino Eduardo Berizzo -destituido el 22 de diciembre-, dio "las gracias al presidente (José Castro) y al club" por darle la "gran oportunidad" de entrenar al Sevilla y de iniciar esta etapa en el fútbol español.
"No era un sueño, era un objetivo que tenía y lo he alcanzado. Quedé encantado cuando estuve aquí -en la semifinal de la Europa League 2014-15 que la Fiorentina perdió con el Sevilla-. Me encantó el estadio, el club; hay un espíritu muy bello para todos los que jugamos al fútbol", subrayó el extécnico, entre otros, del AC Milan.
Además de mostrar su deseo de recuperar para su proyecto al medio francés Steven Nzonzi, que se ha perdido los siete últimos partidos del Sevilla por una disputa con Berizzo, explicó que, "antes que nada", quiere "entender el espíritu de esta ciudad y del club".
Acompañado por Castro y el director deportivo sevillista, Óscar Arias, indicó que ha visto algunos partidos de su nuevo equipo, sobre todo de la 'Champions', y ahora "lo primero" que va a hacer es ver los últimos para saber "lo que le pasó en las últimas semanas". "El Sevilla tiene que jugar con espíritu, con pasión, e intentar imponer su fútbol. Éste va a ser mi primer objetivo", recalcó Montella, que admitió que aún no ha hablado de posibles fichajes con Arias, sólo de sus "ideas en función del equipo" que ya tienen.
Aun así, aclaró que lo harán y si ven alguna necesidad en la plantilla, tratarán de cubrirla, aunque son "una familia y las decisiones importantes hay que tomarlas todos juntos". Añadió que su idea de fútbol "se concreta a través de un modelo de juego activo, de espíritu de grupo, de pasión, y ésta tiene que empezar dentro de cada uno de los jugadores", y defendió que cree que si intentan "jugar al fútbol, es más fácil ganar".
Al italiano le hubiera gustado tener más días para preparar su debut, el 3 de enero en Cádiz en la Copa del Rey, y luego el derbi del día 6 contra el Real Betis, del que dijo que ya sabe que en ellos "se habla de la guasa", en alusión a los típicos piques que hay en la ciudad entre béticos y sevillistas. "No es un partido cualquiera. He vivido muchos derbis en Roma, Génova y Milán, y sé que son partidos distintos. Éste tendremos que prepararlo con corazón y pasión, pero sobre todo con cabeza y lucidez mental", manifestó Montella.
Aseguró que contará "con los veinticuatro jugadores" del plantel, pues son "un equipo", y resaltó la "ayuda" para adaptarse de uno de sus asistentes, el exsevillista Enzo Maresca, que es "parte de la historia de este club y tiene el respeto de todos en Italia", y también el suyo.
Sobre el argentino Joaquín Correa y el colombiano Luis Muriel, a quienes tuvo en la Sampdoria, señaló que, como muchos en el Sevilla, "tienen un gran talento" y "pueden explotar por su gran potencial".
Por su parte, Castro y Arias aseguraron que Montella era "la primera opción" tras la salida de Berizzo, "por sus características como técnico, su propuesta de juego, su capacidad profesional" y por que "la plantilla se amolda mucho a su idea", según el director deportivo, al ser un técnico italiano "un tanto atípico".