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NO ACEPTA CONSEJOS DE NADIE PARA REVERTIR SU SITUACIÓN
Mourinho niega una rebelión contra él en el vestuario: "Es una acusación muy triste"
Mourinho niega que haya una rebelión contra él en el vestuario del Chelsea y califica dichas informaciones como "una acusación muy triste". Además, el técnico portugués no quiere aceptar consejos de nadie para revertir la situación de su equipo: "Cuando alcanzas mi nivel, es difícil aprender de otros. Tienes que aprender de ti mismo y de tus experiencias del día a día", afirmó.
El entrenador del Chelsea, José Mourinho, negó hoy que haya una rebelión contra él en el vestuario de Stamford Bridge motivada por la racha de malos resultados que acumula el equipo. Ante los rumores en los medios británicos de que algunos jugadores están en contra de que el luso siga al mando de la plantilla, Mourinho dijo en rueda de prensa que se trata de "una acusación muy triste".
"Estás acusando a uno o más jugadores de ser deshonestos, y yo te acuso a ti de ser un periodista deshonesto", respondió Mourinho a una pregunta sobre la supuesta rebelión. La cadena BBC informó hoy de que un jugador del equipo, al que no nombró, ha declarado que prefería perder antes que ganar un partido a las órdenes del portugués.
Un blog deportivo británico acusó además al español Cesc Fàbregas de haber liderado una "minirevuelta" entre la plantilla del Chelsea, una afirmación de la que el exbarcelonista salió al paso en Twitter. "Quiero clarificar que, al contrario de lo que dicen algunas informaciones en medios digitales, estoy extremadamente contento en el Chelsea y que tengo una excelente relación con el entrenador", afirmó el centrocampista. "Quizás haya algunos individuos que quieren desestabilizar al club desde fuera, pero creo firmemente que vamos a superar esto", añadió.
El Chelsea, que mañana, miércoles, jugará ante el Dinamo de Kiev en la Liga de Campeones, ha perdido seis de sus once partidos esta temporada en la liga inglesa, un escenario que ha dejado a Mourinho en la cuerda floja. Con todo, el técnico portugués negó que sienta presión en su puesto y, cuestionado por cuánto tiempo cree que le queda para enderezar el ritmo del equipo, afirmó que "tres años y nueve meses", el plazo que falta para que termine el contrato que firmó al inicio de esta temporada.
El entrenador dejó claro a los periodistas que no aceptará consejos de nadie para darle la vuelta a la situación del equipo. "Cuando alcanzas mi nivel, es difícil aprender de otros. Tienes que aprender de ti mismo, de tus propias experiencias al analizar día a día tu trabajo", afirmó.
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