El Nápoles se impuso por 2-0 al Génova en la Serie A italiana (Primera División), en su último partido antes de viajar a España para medirse al Real Madrid, en los octavos de final de la Liga de Campeones.
El polaco Piotr Zielinski y Emanuele Giaccherini anotaron los goles decisivos, ambos a pase del belga Dries Mertens, para un Nápoles que salió ovacionado por los 45.000 espectadores que acudieron al estadio San Paolo y que animaron a sus futbolistas de cara a la cita europea con el Madrid.
Los "azzurri" disputaron un partido de buena madurez, en el que supieron esperar el momento propicio para marcar y en el que no concedieron ocasiones a la delantera del Génova, que estaba liderada por el argentino Giovanni Simeone, hijo del técnico del Atlético Madrid, Diego Pablo.
El técnico Maurizio Sarri, que no podía contar hoy con el español José Callejón, sancionado, apostó por un tridente sin un delantero centro clásico y con Emanuele Giaccherini, Dries Mertens y Lorenzo Insigne, todos desde el primer minuto. El duelo empezó con un susto para los napolitanos, ya que Mertens se quedó en el suelo tocándose el muslo derecho.
Los goles no llegaron hasta la segunda parte
Después de unos momentos de tensión, el belga se levantó y pudo seguir jugando sin problemas físicos. El Génova presionó muy alto a los napolitanos al comienzo del partido y no permitió la circulación rápida del balón entre los medios y los extremos del cuadro de Sarri, que es su primer arma para abrir las defensas rivales.
Sin embargo, después de la media hora el Génova bajó su intensidad y el Nápoles lo aprovechó para crear sus primeras ocasiones de gol. En el 32, el senegalés Kalidou Koulibaly lo intentó con una volea que terminó fuera mientras que en el 35 el portero Eugenio Lamanna realizó una gran intervención tras un remate de Insigne.
El conjunto visitante logró irse al descanso con el 0-0 en el marcador pero tuvo que realizar dos cambios por lesión: el argentino Santiago Gentiletti fue reemplazado por su compatriota Lucas Orbán mientras que el portugués Miguel Veloso fue sustituido por Danilo Cataldi.
Con la mente puesta en el Madrid
El cuadro napolitano, que había cerrado la primera mitad creciendo, empezó la reanudación con gran agresividad y logró adelantarse en el minuto 50 por medio de Zielinski, que aprovechó una gran asistencia de Mertens para firmar su tercer gol de la temporada.
Tras desbloquear el encuentro, el Nápoles dispuso de más espacios al contragolpe y amplió distancias en el minuto 67, cuando Giaccherini empujó entre las mallas tras recibir otra buena asistencia de Mertens. Con el resultado ya encarrilado, Sarrio sustituyó al capitán eslovaco Marek Hamsik y a Mertens, para darles descanso y para evitar el riesgo de eventuales lesiones de cara al choque contra el Real Madrid.
Tras el pitido final, el Nápoles recogió durante algunos minutos los cánticos de su afición, que les motivó de cara a su visita al Santiago Bernabéu del próximo miércoles. Con este triunfo, los napolitanos superaron momentáneamente al Roma y se hicieron con la segunda plaza, con 51 puntos, a seis de distancia del líder Juventus Turín.