Otro error del portero de la selección española le costó caro al conjunto de Ole Gunnar Solskjaer, que puso más de su parte por conseguir el triunfo en un choque que tenía como objetivo la consecución de la cuarta posición de la tabla.
El Chelsea, que tenía a tiro el tercer lugar que ostenta el Tottenham, que el sábado tropezó contra el West Ham, salió satisfecho con la igualada días antes de viajar a Fráncfort para iniciar la semifinal de la Liga Europa, objetivo claro de los 'blues' para maquillar un año decepcionante.
El choque de Old Trafford tuvo claro color español. Los dos goles fueron anotados por futbolistas de España. El primero, que puso por delante al Manchester United a los once minutos, llegó gracias a Juan Mata que, desde el punto de penalti y tras recibir un pase de Luke Shaw, superó a Kepa Arrizabalaga.
El United se mostró superior a su rival. En empuje, propuesta y ocasiones. Sin embargo, una acción casi aislada al filo del descanso, supuso el empate. Un premio inmerecido en los 45 minutos iniciales.
Fue tras un disparo muy lejano y centrado del alemán Antonio Rudiger que a De Gea se le escapó de las manos. El rechace fue a caer a los pies de Marcos Alonso, que superó al meta español, marcado por un nuevo error.
El Chelsea mejoró en la segunda parte aunque no fue capaz de aprovechar su dominio. En el tramo final, el United recuperó el pulso al partido y cercó el área de Kepa. Pedro sacó bajo palos, con el portero batido, un remate de cabeza del argentino Marcos Rojo en el tiempo añadido.
No marcó y el choque terminó en tablas. El punto asienta al equipo de Mauricio Sarri en la cuarta posición, con dos puntos de ventaja respecto al Arsenal, superado en Leicester (3-0) y tres sobre el Manchester United, que es sexto.
A falta de dos jornadas, el Chelsea está a solo dos del tercer lugar del Tottenham.