Un golazo de Sarabia da el triunfo al Sevilla frente al Leganés

El Sevilla puso fin en Butarque a su maleficio liguero fuera de casa, donde no ganaba desde hacía más de un año, gracias a un golazo postrero de Sarabia que anuló las esperanzas de remontada del Leganés (2-3).

Pusieron los locales de inicio el mismo once que en Granada, señal de que Asier Garitano empieza ya a asentar su bloque de titulares. En el caso del Sevilla, las bajas en defensa hicieron que Sampaoli apostara por Iborra como central. Tenían los locales las ideas bien claras. Robar y salir a la contra, tocar poco y correr mucho. Serios en el centro del campo, obligaban a trabajar a Nasri lejos de su zona de confort y dificultaban la aparición de Vázquez y Vitolo.

En el Sevilla, quien destacaba era Mariano. Encargado de desabrochar el corsé que apretaba al equipo con sus incorporaciones por carril diestro, una de esas aventuras fue la génesis del primer tanto de la mañana. El brasileño llegó en la ayuda, contemporizó, entregó a Vietto y este puso un centro al área que cabeceó viniendo desde atrás Vázquez.

La diana en contra ralentizó el juego vertiginoso del Leganés pero no la sensación de dominio. Disminuyeron las ocasiones claras, aunque las hubo. Buscó el palo del portero Rubén Pérez con una falta desde la frontal y respondió al reto con seguridad Sergio Rico desviando el esférico. De ahí al descanso, solo zozobra.

Roja perdonada a Franco Vázquez

Y en el combate, pudo salir perdiendo el Sevilla. Vázquez, que ya tenía amarilla, cometió una falta contundente e innecesaria después de que el Leganés no devolviera un balón lanzado fuera. El colegiado evitó complicaciones y sancionó a Vitolo y Gabriel por la tangana posterior. El paso por vestuarios activó de nuevo al anfitrión. En menos de un minuto Szymanowski puso a prueba la dureza de las manos de Rico después de caracolear en el área y Gabriel hizo lo propio con un tiro que acabó en despeje. Omar lo capturó pero su intento posterior impactó en la defensa.

Esa efectividad que le faltaba a los madrileños le sobraba a los visitantes. En su primer acercamiento claro de la segunda parte Escudero fue ganando metros hasta llegar a zona de peligro. Se la dio a Vietto y este se encargó de asociarse con Nasri. Salvó Serantes con acierto el intento inicial del galo pero nada pudo hacer con el segundo.

El Leganés muere en la orilla

Acariciaban los hispalenses un triunfo balsámico que además les ponía líderes provisionales pero Butarque rara vez se rinde. Al poco de encajar el golpe, un esférico que cayó en la media luna lo enganchó con furia Timor para recortar distancias. Esparcía el Leganés gasolina por el verde y llegó con el mechero Szymanowski para terminar de incendiar a la grada. El argentino le ganó la espalda a la defensa para hacerse con un pase largo de Rubén Pérez y definió con delicadeza ante la salida del arquero.

Se entonó en la grada el 'sí se puede', aunque fue un espejismo. Sarabia, que había entrado por Iborra, apareció por el borde del área y se sacó un zapatazo con efecto que se coló por la escuadra enmudeciendo a los presentes. Un tanto que permite a los andaluces ganar como visitantes después de veintidós salidas ligueras sin hacerlo y que condena a los locales a esperar para conseguir el primer triunfo ante su público en la máxima categoría.