Varios aficionados que asistieron al partido que enfrentó al Sevilla y al Málaga en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán necesitaron asistencia médica por parte de los servicios sanitarios debido a las altas temperaturas, especialmente en aquellas zonas de la grada en las que no daba la sombra.
Las temperaturas superaron los 32º, aunque la sensación era muy superior en aquellos sectores donde el sol era intenso. Como consecuencia, las personas que estuvieron presentes en el estadio no han dudado en mostrar sus quejas a LaLiga por la decisión de programar el encuentro a las 16:15 horas.
En esa línea ha abundado Eduardo Berizzo, que en rueda de prensa ha revelado su molestia por el horario escogido para la celebración del encuentro. "Los que menos riesgos han corrido han sido los futbolistas, pero la gente se llevó tres horas en un horno, con una temperatura altísima sin estar entrenada para ello y soportando una temperatura extremadamente alta. No hay que ser muy inteligente para saber que en Sevilla a las cuatro de la tarde hace calor. No creo que las televisiones tengan la necedad de no darse cuenta, porque además afecta al juego y los partidos no son dinámicos ni ágiles, por lo que la elección de la hora es totalmente contraproducente", manifestó.