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CHAMPIONS LEAGUE JORNADA 4 | REAL MADRID 1 - 0 PSG
Nacho salva al Real Madrid del vendaval del PSG
En un partido malo del Real Madrid, Nacho, que salió al campo en lugar de un lesionado Marcelo, le dio los tres puntos al conjunto de Rafa Benítez. Los blancos fueron inferiores durante prácticamente todo el partido, pero la victoria le clasifica para octavos de final y le pone virtualmente como primero de su grupo.
El Santiago Bernabéu acogía uno de los partidos por los que la Champions tiene el prestigio que tiene. Uno de los que crean afición, de los que ponen magia y ponen los pelos de punta a los aficionados.
El Real Madrid recibía al PSG en lo que se podía considerar
una final anticipada de la máxima competición europea. Los blancos recuperaban
piezas clave para este partido, como podían ser James o Pepe, aunque otros como
Benzema o Bale no llegaron a tiempo.
El PSG también recuperaba a un hombre clave: David Luiz. El
central no pudo jugar el primer partido por lesión, pero al segundo partido no
podía faltar. Con todas las estrellas sobre el verde, sólo faltaba el balón y
el pitido del árbitro.
Aparatoso choque entre Isco y Aurier
Rodó el balón en el Bernabéu y ambos se pusieron al 110%. Empezó mandando el
PSG, siendo eléctrico en la presión y preciso en los pases. El Madrid buscaba
poco a poco su sitio en el campo, como bien decía Juanito, 90 minutos en el
Bernabéu son muy largos.
Ni siquiera el Rey Juan Carlos se quiso perder el partido.
En los primeros minutos del encuentro, Isco y Aurier sufrieron un choque en el
que el malagueño se hizo una brecha en la cabeza y tuvo que ser atendido en la
banda.
Sin embargo, ninguno de los dos se fueron del campo. El que
sí se fue del campo con una lesión muscular fue Marco Verratti. El italiano
intentó seguir en el césped, pero finalmente se tuvo que marchar.
Doble susto para el Madrid
El primer susto para el Real Madrid se lo llevó en el minuto 20. Ángel di María
se internó por la banda derecha y puso un balón franco para que Matuidi
rematara a la portería de Keylor Navas.
La suerte para los blancos fue que le cayó a la pierna mala
y le salió un tiro asequible para Keylor ‘Paras’, como le llaman en el
vestuario del Real Madrid. A los dos minutos, tuvo otra clarísima Ibrahimovic
con un tiro colocado que se marchó fuera por poco.
Lo cierto es que el Real Madrid se estaba viendo muy superado por el PSG en la primera hora de partido. Los franceses se plantaban en el área con suma facilidad y la defensa del Madrid sufría lo indecible.
Marcelo, lesionado
Para colmo, Marcelo se retiró lesionado del campo por lo que parecía una rotura
fibrilar. Una pésima noticia para uno de los intocables para Rafa Benítez, al
que sustituía Nacho en el lateral izquierdo.
Cuando más acorralado estaba el Madrid, cuando peor lo
estaba pasando, cuando más cerca parecía el gol del PSG, apareció precisamente
el canterano. Kroos disparó desde la frontal del área, su disparo salió
desviado a la banda izquierda, donde Trapp salió a por uvas y Nacho lo
aprovechó.
El canterano definió como si de un delantero se tratase y el
balón se coló en la portería del PSG. Se adelantaban los blancos, un gol que
era un balón de oxígeno. No lo mereció, pero así es el fútbol.
La tuvo Cavani
Sin embargo, el PSG no se arrugó y siguió atacando sin descanso a la portería
de Keylor Navas. Cavani, Ibrahimovic, Di María… Todos probaron suerte, pero
ninguno la encontró. Parecía imposible que no llegase el gol, la ofensiva era
total.
Antes de llegar al descanso, Cavani tuvo una de las más
claras. Aprovechó un pase milimétrico de Di María para intentar picarle el
balón a Navas, pero su definición no fue la mejor y Varane tuvo tiempo de
llegar para despejar el balón en la línea de gol.
Pitó el árbitro un descanso más que necesario para el Real
Madrid. Benítez les diría un par de palabras a sus jugadores, que se vieron
totalmente sobrepasados ante su rival. El público del Bernabéu tampoco salió
contento pese al gol, sufrieron mucho y se temían que más iban a sufrir.
Probó suerte Isco
Arrancó la segunda parte y el guion fue parecido al de la primera. Comenzó
dominando el PSG, llegando por las bandas, por el centro, por todas partes.
Liderados por un inspirado Di María, los franceses llegaban y llegaban al área.
También las tenía el Real Madrid, aunque eran mucho menos
frecuentes. Probó Isco desde la frontal del área y su tiro salió rebotado en un
defensa. El balón casi se cuela en la portería de Trapp, que estaba pasando una
noche tranquila salvando el gol de Nacho.
En su segundo cambio, Rafa Benítez metió a Lucas Vázquez en
lugar de Jesé, un refresco para intentar presionar y enfriar las arremetidas
del PSG. Tras un rato en el que el PSG parecía que se apagaba, volvió a la
carga en busca de hacerle gol a Keylor Navas.
La volvió a tener Isco
Otra vez la tuvo Isco Alarcón. Lucas Vázquez se internó por banda derecha,
colgó un balón envenenado al segundo palo, un segundo palo en el que esperaba
Isco. Disparó con toda su alma y con la cara ensangrentada, pero Trapp sacó un
pie milagroso para evitar el segundo del Madrid.
Quedaban pocos minutos, le tocaba sufrir al Real Madrid. Ya
llevaba sufridos todos los minutos del partido, había que aguantar un último ‘stint’,
como se diría en la Fórmula 1. El PSG estaba volcado, el primer puesto del
grupo estaba en juego y se notaba.
El último cambio que usó Benítez fue para meter a Kovacic en
el campo en lugar de un malherido Isco. Kroos tuvo la oportunidad de meter el
segundo, pero de nuevo Trapp detuvo el tiro del alemán.
El primer puesto, virtualmente conseguido
Los minutos pasaban, unos minutos agónicos, estaba mucho en juego y la
distancia era mínima. El PSG lo iba a intentar hasta el final, de eso no
quedaba duda. Al Madrid se le veía cómodo, con un Nacho muy seguro en defensa.
La última la tuvo Di María. La tuvo el Fideo, el que tantos
goles metió en la portería del Santiago Bernabéu. Volvía a la que fue su casa y
tenía la falta para empatar el partido. Su zurdazo se estrelló en el larguero y
con ello la última ocasión de su equipo para empatar.
Con este 1-0 sufrido del Real Madrid, se aseguran
virtualmente el primer puesto del grupo y matemáticamente su presencia en
octavos. No fue el mejor partido de los blancos, pero el resultado es lo que
cuenta en el deporte.
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