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LIGA BBVA JORNADA 14 | REAL SOCIEDAD 2-1 EIBAR
Agirretxe da la victoria a la Real en el derbi frente al Eibar
La Real Sociedad de Eusebio ha conseguido los tres puntos en un igualadísimo derbi frente al Eibar en Anoeta. A pesar de que los armeros se adelantaron prontísimo en el marcador por medio de Borja Bastón, los 'txuri urdin' no se descompusieron y remontaron gracias a dos tantos de Agirretxe.
La Real Sociedad sigue abonada a Imanol Agirretxe que con dos goles, uno de ellos en el minuto 90, ha vencido a un Eibar que ha ofrecido una estupenda imagen en Anoeta. El Eibar más descarado y ofensivo que ha pisado el estadio realista ha mostrado la dualidad de esa nueva forma de jugar muy gráficamente en los diez primeros minutos de juego, en los que ha entrado al partido muy enchufado y también con sus líneas muy abiertas.
El conjunto de Mendilibar ha marcado después de un primer aviso el 0-1, por medio de Borja Bastón, pero antes de que la afición local se pusiera nerviosa y con mucho público todavía por acceder al graderío, ha empatado Agirretxe al rematar un balón que venía rechazado de la defensa eibarresa.
El derbi se ha igualado a partir de esos primeros instantes locos, el fútbol ha recuperado la cordura de los derbis equilibrados de años anteriores y la primera mitad ha transcurrido algo más plácida para ambas defensas, que tenían que extremar el control en Keko por el lado visitante y en Agirretxe por los blanquiazules.
El Eibar, vestido de amarillo en la mañana de Anoeta, ha incrementado su presión y presencia en el área donostiarra en el tramo final del primer período, hasta el punto que parecía que la Real jugaba fuera a la contra y, al borde del descanso, ha vuelto a tener una clara ocasión de gol en un remate casi a cámara lenta de Borja Bastón.
La Real ha mejorado en el segundo tiempo, con el apoyo de un Carlos Vela que ha realizado una jugada individual brillante para dejar sólo ante Riesgo a Agirretxe, que no ha acertado con su remate cuando se celebraba ya el segundo gol por la afición txuriurdin. Eusebio Sacristán, consciente de que este resultado enterraba muchas ilusiones de futuro, ha metido más potencia en ataque con la pareja Agirretxe-Jonathas, en busca de ese segundo gol que pudiera dejar los puntos en casa.
El Eibar, con una plantilla de menos relumbrón, no se ha descompuesto y ha seguido llevando peligro constante a la portería de Gero Rulli en la búsqueda de un triunfo en el que creía totalmente. El toma y daca final ha beneficiado a la Real en el último minuto cuando, en una jugada de cierta fortuna, ha encontrado el gol de Agirretxe tras un pase con suspense del portugués Bruma, para llevar al éxtasis a una afición que ha liberado la tensión acumulada.
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