Fútbol Club Barcelona
Sale a la luz el contrato que convirtió a Gerard Piqué en el central mejor pagado del mundo en 2018
Gerard Piqué pidió ser el central mejor pagado del mundo y en enero de 2018 firmó un contrato de cinco años por 142 millones de euros brutos. El Barça barajó sancionar al jugador por el documental de Griezmann.
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Segundo capítulo de 'Barçaleaks' en el que el diario El Mundo desvela nuevos detalles sobre los contratos e interioridades del Fútbol Club Barcelona. Si la primera entrega abordó las cláusulas que trató de imponer Leo Messi a Bartomeu para renovar en 2020, ahora es el turno para Gerard Piqué.
El central catalán pidió al club convertirse en el central mejor pagado del mundo por encima de Sergio Ramos, algo a lo que accedió Bartomeu. Piqué firmó en enero de 2018 un contrato de cinco temporadas a cambio de 142 millones de euros brutos, es decir, en torno a los 15 millones netos por temporada.
La información de El Mundo también desvela que el club culé incluyó en el contrato de Piqué un "bonus fiscal" para amortiguar las sanciones de Hacienda que reclamaba al jugador 7,1 millones de euros.
En 2020 Gerard Piqué se vio obligado a prolongar su contrato y diferir los pagos por las causas económicas que provocó la pandemia del coronavirus al club culé.
Bartomeu no se atrevió a sancionar a Piqué por el documental de Griezmann
El diario El Mundo también desvela que la directiva del Barcelona elaboró un informe en el que se señalaba a Gerard Piqué como causante de un "gravísimo perjuicio al club" por el documental sobre Griezmann.
Y es que Kosmos, la empresa de Gerard Piqué, fue la encargada de producir el documental 'La decisión', en el que Griezmann decidía si fichaba por el Barça y abandonaba el Atlético. AL final, el futbolista francés decidía quedarse en el Atlético.
En el informe encargado por Bartomeu, según los correos a lo que ha tenido acceso El Mundo, se concluía que Piqué "antepuso sus intereses a los del club" y "creo un conflicto de intereses". El por entonces presidente del Barcelona barajó la posibilidad de sancionar a Piqué, algo que finalmente no se produjo por "la posible "presión mediática" y el interés en que el defensa cumpliese su contrato.
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