Santos Borré da la Europa League al Eintracht en los penaltis

El Eintracht de Frankfurt es el nuevo campeón de la Europa League 2022. El equipo alemán volvió a alcanzar la gloria, 42 años después de su primer y hasta este miércoles único título europeo en la antigua Copa de la UEFA (1980), al vencer en la tanda de penaltis al Rangers de Glasgow con un chut decisivo del colombiano Rafael Santos Borré.

Tras una final que acabó 1-1 en el tiempo reglamentario y en la prórroga, con goles del nigeriano Joe Aribo en el 57 para los escoceses y del propio Borré para el Eintracht en el 69, el delantero colombiano convirtió el penalti clave (5-4) después de que el galés Aaron Ramsey fallara el único lanzamiento de la tanda para el Rangers.

Fue una final muy igualada y disputada. Se medían dos clubes históricos y con ansias de triunfo, el Eintracht del técnico austriaco Oliver Glasner, tras eliminar en semifinales al West Ham, 42 años después de su único título europeo (la Copa de la UEFA de 1980), y el Rangers, que superó antes de la final al Leipzig alemán, justo medio siglo después de la única vez, igualmente, en la que levantó un trofeo en Europa (la Recopa de 1972).

Más de 100.000 aficionados

Una marea de aficionados tomó Sevilla para esta final: más de 100.000 aficionados de ambos equipos... y bastante más de la mitad sin entrada al estar limitado a 40.000 el aforo del Ramón Sánchez-Pizjuán, De hecho, se produjeron enfrenamientos entre ambas aficiones antes de la gran final.

Era un encuentro entre conjuntos con estilos distintos. El Eintracht, con un mayor gusto por el toque a la hora de crear se arriba y acumulando mucha gente en sus ofensivas, salió con más ímpetu que el Rangers del técnico neerlandés Giovanni Van Bronckhorts, viejo conocido en España tras su paso por el Barcelona, un equipo más dado a atacar desde la seguridad y el control, con sus laterales, el inglés James Tavernier y el croata Borna Barisic, muy incisivos.

Trapp: una parada a bocajarro que vale un trofeo

El portero del Eintracht fue finalmente elegido mejor jugador del partido. Fue Trapp, quien, casi al final, salvó dos veces a su equipo al sacar un balón casi a bocajarro de Kent y una falta directa de Tavernier, con lo que se llegó a una tanda de penaltis en la que se ganaron el honor y la gloria los alemanes.

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