El VAR. Querido por unos, y menos querido por otros. Pero, para todos, ha llegado para posiblemente quedarse. El videoarbitraje fue fundamental en el Clásico entre el Barcelona y el Real Madrid, donde entró y acertó al señalar como penalti una falta dentro del área de Varane a Luis Suárez.
El francés llegó tarde a la jugada y trabó al punta del Barcelona, que se había adelantado y que se fue al suelo después del impacto del jugador galo. Sánchez Martínez no vio nada punible, pero al instante hizo el gesto del VAR, se fue a la pantalla y en muy poco tiempo señaló penalti.
El uruguayo puso el 2-0 para los azulgranas con esa acción ante un Real Madrid completamente grogui en la primera mitad.