La policía de cuatro países ha llevado a cabo una operación contra 'ultrashop', el mayor proveedor de material para los grupos ultras de Europa. Se trata de una tienda que suministraba bengalas, petardos y todo tipo de material explosivo a diferentes grupos radicales.
La operación policial es un duro golpe para el movimiento ultra en Europa, que se queda sin su mayor proveedor. En la operación se han detenido a 35 personas y se han decomisado más de 500 kilos de material explosivo.