Las peores horas de Iker Casillas: "Él no pensaba que tenía un infarto"

Iker comienza el entrenamiento al lado de Pepe cuando de repente se agarra el pecho y empieza a sentir un fuerte dolor en sus brazos.

Iker es retirado del entrenamiento en un carro eléctrico y llevado al vestuario. El médico del Oporto detecta la gravedad de la situación, vital para salvar la vida del portero.

Necesita ser operado de forma urgente. El tiempo corre, están a media hora de uno de los mejores equipos de cardiología de Portugal: El hospital CUF, situado en la zona norte de la ciudad, a 25 kilómetros del campo de entrenamiento del Oporto.

Cuando entra Iker es intervenido de urgencia de un infarto agudo. Será después cuando Casillas sepa qué ha ocurrido. Por el hospital pasará más tarde su mujer, la periodista Sara Carbonero, que se encontraba lejos de allí, en Tarifa.

En redes sociales publica la prueba de que su marido está bien, unas manos entrelazadas y ambos sonrientes con un mensaje emotivo: "Todo quedó en un susto. Como decía hoy una buena amiga, la vida tiene a veces esa extraña manera de recordarnos celebrar cada latido".

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