De Gazprom al futuro de Haas: las empresas rusas se quedan sin patrocinios en el deporte

La invasión de Rusia a Ucrania ha provocado la reacción del tablero político internacional, pero también la del mundo del deporte y de sus organismos. Desde que se inició la guerra en Ucrania, se han impuesto una serie de medidas con el fin de aislar al país. A esto se suma el 'no a la guerra' de numerosos deportistas de todas las nacionalidades.

Uno de los ejemplos más significativos es el del consorcio de gas Gazprom. El equipo alemán Schalke 04 ha rescindido el contrato que tenía hasta 2025 con la empresa tras los últimos acontecimientos, una decisión que le va a llevar a dejar de ingresar 9 millones de euros anuales.

Pero la pérdida de patrocinios no se queda solo en el club, sino que Gazprom también es uno de los principales sponsors de la Champions League y cuyo logo se veía en todos los carteles de la competición. También pierde visibilidad el equipo de ciclismo, tras la decisión de la UCI de expulsar a todos los equipos rusos y bielorrusos de la competición. Se trata de una empresa que, además, invierte 90 millones al año en deportes y que puede ver seriamente dañada su influencia. En dos semanas, sus acciones se han desplomado.

Precisamente, la UCI también ha desautorizado cualquier patrocinio ruso o bielorruso y ha pedido a los organizadores de eventos y a los equipos que "no otorguen ninguna visibilidad a los patrocinadores rusos o bielorrusos en los eventos del Calendario Internacional". Esta decisión afecta al banco Vozrozhdenie, que también posee un equipo.

Otra de las damnificadas es la aerolínea Aeroflot, patrocinadora del Manchester United. El equipo inglés decidió romper su contrato con esta empresa con la que habitualmente viajan para desplazarse a sus partidos fuera de casa. De hecho, el equipo ya voló con otra compañía para viajar a Madrid para enfrentarse con el Atlético de Madrid en el Metropolitano. Además, a esta aerolínea le afecta también la decisión del Reino Unido de cerrar su espacio aéreo a aviones rusos.

Por otro lado, la Euroliga ha roto su relación comercial con el con el VTB Bank ruso, que también es patrocinador de el Gran Premio de Rusia que se celebra en Sochi y que también ha perdido este evento por las sanciones.

El caso Haas

Un caso especialmente relevante es el del equipo de Fórmula 1 Haas. Se trata de una escudería estadounidense, pero con patrocinadores rusos. Ya durante el último día de las pruebas en Montmeló, el equipo salió con el coche totalmente en blanco. No había ni rastro de la bandera rusa que habitualmente decora el monoplaza ni de su principal patrocinador, la empresa rusa de fertilizantes Uralkali.

El futuro de esta escudería ya estaba en entredicho en las últimas temporadas, pero el estallido de la guerra puede implicar la congelación de sus activos financieros y, con ellos, una contrarreloj a por nuevos patrocinadores.

Abramovich y el Chelsea

Otro caso es el del Chelsea, cuyo propietario, Roman Abramovich, es uno de los oligarcas rusos con mayor poder. En vista de las sanciones, Abramovich ya cedió a administración del club a los responsables de la Fundación. Ahora, se plantea incluso que el multimillonario venda el equipo y que este deje de recibir dinero ruso.

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