El golf rústico, la nueva modalidad que se practica sobre tierra: es gratis y no hay horarios

Empieza a imponerse, poco a poco, un nuevo estilo de golf: el golf rústico. El terreno es distinto, la hierba no existe, y por eso jugar ahí no es tarea fácil. Un equipo de Antena 3 ha hecho la prueba: hemos llevado allí a un jugador profesional y se ha demostrado que es más complicado que en un campo normal.

La idea que tenemos en la cabeza de un campo de golf es la de un terreno de hierba muy bien cuidada, sin embargo, el gol rústico se puede practicar en un terreno sin hierba, menos cuidado y con alguna que otra piedra por el camino.

"Este campo era una escombrera y entre muchos, con palas y máquinas hemos arreglado el campo", explica Pablo Lucas, presidente del Club de golf Pozuelo.

12 amigos lograron reconvertir el terreno en un campo de golf rústico, es decir, ningún movimiento de terreno, lo mínimo imprescindible para la practica del golf: "Cuando jugamos los domingos quitamos la arena y lo dejamos liso para que se pueda jugar bien", asegura Pablo.

12 euros para ser socio y sin problemas de horarios

Un tipo de juego distinto, donde el factor suerte influye: "Es un terreno mucho más duro y no sabes donde te va a botar", nos cuenta un jugador de gol rústico. Sin embargo, gana cada día más adeptos, porque la cuota para ser socio, es simbólica, solo 12 euros: "Aquí no hay problemas de hora, vienes y juegas".

Aquí todos son bienvenidos: "Formamos como una familia". También disfrutan del juego los profesionales: "Es una experiencia muy bonita, la pena es que hay pocos campos rústicos, tendría que haber más", dice Kiko Luna, entrenador del equipo nacional de golf.

Porque un campo rústico, pone a prueba todas las habilidades del jugador: "Te das cuenta de que tienes que tener muchos recursos", aclara Kiko. Eso sí, al terminar, como en todos los campos, no falta la casa club, donde comentar la partida con los amigos.

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