Jamel Herring, el marine que llegó a ser campeón del mundo de boxeo: "Lo que más me preocupaba en Irak eran los francotiradores"

Lloraba como un niño al proclamarse campeón del mundo de boxeo. Porque detrás de su fortaleza física hay muchos golpes en la vida, las cicatrices que le dejó la guerra en Irak, la muerte de una hija.

Jamel Herring es el marine boxeador, y a bordo de un vehículo militar llegó a defender y revalidar su título de campeón del mundo de boxeo.

Ahora sus combates son en un ring, pero no olvida los que vivió en Irak. Allí, Jamel Herring estuvo en dos ocasiones como marine. Regresó con estrés postraumático.

"Lo que más me preocupaba eran los francotiradores. Era mi mayor temor cada vez que nos deteníamos. Era como si fuera un viejo pato sentado encima del humvee", revela Herring.

Precisamente encima de un humvee (vehículo militar) entró a la defensa de su título mundial. Su vida está marcada por lo que vivió en Irak con ese coche militar.

Encontró un nuevo camino en el boxeo. Fue olímpico en Londres y como profesional logró ser campeón mundial. Siempre eso si rodeado de los marines a los que también esta vez ha dedicado su triunfo.

"Para todos nuestras tropas que defienden nuestro país en peligro en tantos campos de guerra! Esto es para vosotros", exclamaba tras su victoria.

Pero en sus pensamientos también está su hija Ariyanah. Solo tenía dos años cuando falleció en sus brazos a causa de una muerte súbita.

"Intenté reanimarla... Pero no pude hacer nada", cuenta emocionado Herring, que siempre lleva escrito el nombre de su hija en su pantalón de combate.