La serie de Netflix 'Gambito de dama' se ha convertido en todo un éxito mundial. La historia de Beth Harmon es ficción, pero la húngara Judit Polgár fue realmente un prodigio y una pionera en el ajedrez.
Así recuerda Polgár sus primeros encuentros contra Kaspárov: "Él daba la impresión de que te iba a comer viva". Así habla la ajedrecista húngara sobre la serie: "Hay un paralelismo entre la ficción y la realidad. La realidad es que era yo la que estaba compitiendo contra hombres en la alta competición".
Esto decía Bobby Fischer sobre las mujeres ajedrecistas: "Son terribles jugadoras de ajedrez. Supongo que no son tan inteligentes". Garri Kaspárov no se quedaba atrás: "Yo era bastante escéptico acerca de las jugadoras femeninas".
Sin embargo, Judit Pólgar les hizo cambiar de opinión: "Me reconocieron como una más de ellos, como una de las mejores jugadoras de ajedrez".
La cumbre de su carrera
En 2002 logró derrotar al mejor del mundo, al mismísimo a Kaspárov: "Conseguí varios empates, memorables para mí, y después fui capaz de vencerle en una ocasión".
Un prodigio que cambió la historia del ajedrez: "No es correcto decir como muchos hombres dicen que las mujeres no son capaces y que Judit fue una excepción. Creo que demostré que es posible".
La 'triple P'
Un éxito que ella misma resume con la 'triple P': práctica, perseverancia y pasión. El ajedrez a día de hoy sigue siendo un deporte eminentemente masculino, pero Judit Polgár tumbó una gran barrera.