La madre de Rubiales recibe el alta y sale del hospital acompañada por el expresidente de la RFEF

Ángeles Béjar ha sido dada de alta en la última noche. La madre de Luis Rubiales ha salido del Hospital Santa Ana de Motril acompañada de su hijo. El expresidente de la RFEF fue a visitar a su madre y sobre las 23:30 horas, salieron del centro hospitalario. La mujer sufrió una crisis nerviosa y tuvo que ser hospitalizada. Llevaba más de 50 horas en huelga de hambre y sólo estaba bebiendo agua para ingerir medicamentos.

La madre de Rubiales ha respondido de forma satisfactoria al tratamiento y esto ha hecho que la paciente mejore en el cuadro clínico por el que fue ingresada. Así lo ha confirmado EFE. Cuando fue ingresada presentaba dolencias por la enfermedad crónica de riñón que padece y que se agravaron desde que se atrincheró en la iglesia.

Béjar se encerró y comenzó una huelga de hambre por la "cacería" que estaba sufriendo su hijo. "La crisis ha sido ahora, por la calor y por todo. Tenía los pies hinchados y ha ido a más. Se ha puesto nerviosa y se ha puesto en un estado de estrés", señaló el padre Antonio al salir de la iglesia donde se encontraba encerrada.

La madre del presidente de la RFEF sancionado por la FIFA había declarado en todo momento que su protesta era para que Jennifer Hermoso "diga la verdad" sobre el beso que le propinó Luis Rubiales. Uno de los familiares enunció que la mujer se mantenía en contacto con su familia y que le pidieron abandonar la huelga de hambre.

Rubiales se queda solo

Pese a que después de la 'famosa' comparecencia de Luis Rubiales en la Asamblea Extraordinaria de la RFEF dio la sensación que el de Motril se consideraba arropado, ha ido perdiendo apoyos en los últimos días. Los presidentes territoriales pidieron su dimisión inmediata. La FIFA lo cesó y la ONU centra su mirada en el caso. Los seleccionadores nacionales que tanto le aplaudieron, Jorge Vilda y Luis de la Fuente, lanzaron comunicados condenando la conducta de Rubiales. Eso sí, tras conocer la sanción de la FIFA.

La presión mediática, deportiva, política e institucional no hace más que crecer por el beso que le dio a Jenni Hermoso y la conducta de Rubiales en la celebración del Mundial y después de Sídney. En Motril aparecieron pintadas de "Rubiales machista" y "Rubiales a la cárcel". Sin embargo, su familia ha cerrado filas. Han defendido a Luis Rubiales asegurando que no merece lo que "está pasando".

Jesús Navas: "No estoy preparado para jugar mi último partido, pero ha llegado el momento"