Marta Manzano, una campeona del mundo de esquí con 5 hijos: "El esfuerzo y la constancia siempre tienen su recompensa"

El deporte siempre ha estado presente en su vida desde que un verano le regalasen una raqueta y no se separase de esta. Las siguientes navidades sumó el ciclismo a su lista tras recibir como regalo una bicicleta, y además de jugar con su padre al fútbol, terminó compitiendo en este y compaginándolo con el tenis, teniendo otros deporte como hobby los fines de semana.

Se define como "cabezota", pero siempre ligada al deporte. Tras un parón de diez años en los que se centró en cuidar de sus cinco hijos, con 35 años decidió volver a entrenar y ahora lleva cuatro compitiendo como profesional: "Fue todo gracias a Pedro Urieta, mi entrenador en Formigal, que me animó a competir y sin el que no estaría haciendo lo que hago ahora. La primera competición me cautivó y decidí continuar compitiendo".

Busca patrocinadores

Competir en el esquí tiene sus dificultades, desde la nutrición y cuidarse para mantenerse en forma cuando no se compite, hasta el presupuesto para entrenar y viajar que es elevado, algo para lo que Marta busca ahora patrocinadores que financien a la que es ya una campeona del mundo.

Se ha proclamado campeona del mundo en categoría veterano, concretamente en la FIS Master Cup en categoría C3 tras un total de 17 carreras en las que los nervios estuvieron presentes en todo momento e incluso hubo un accidente en el que tuvo que intervenir un helicóptero.

En este logro destacan sus inicios: "Cuando empecé el resto de esquiadores me sacaban diez segundos al inicio, sin embargo en el esquí no compites contra otros sino contra ti mismo".

"Quiero ser un ejemplo no solo para mis hijos sino para otras mujeres que se animen a formar parte del deporte, por lo que el esfuerzo y la constancia han sido claves para lograrlo además del apoyo familiar", explica.

Además destaca que "el esquí tiene alegrías y decepciones", con altibajos como una lesión con posterior operación y rehabilitación en su segundo año compitiendo, todos esos obstáculos no son más que alicientes para seguir mejorando y convertirse en su mejor versión.

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